La doctrina del shock es la historia no oficial del libre mercado. Desde Chile hasta Rusia, desde Sudáfrica hasta Canadá la implantación del libre mercado responde a un programa de ingeniería social y económica que Naomi Klein identifica como «capitalismo del desastre».Tras una investigación de cuatro años, Klein explora el mito según el cual el mercado libre y global triunfó democráticamente, y que el capitalismo sin restricciones va de la mano de la democracia. Por el contrario, Klein sostiene que ese capitalismo utiliza constantemente la violencia, el choque, y pone al descubierto los hilos que mueven las marionetas tras los acontecimientos más críticos de las últimas cuatro décadas.Klein demuestra que el capitalismo emplea constantemente la violencia, el terrorismo contra el individuo y la sociedad. Lejos de ser el camino hacia la libertad, se aprovecha de las crisis para introducir impopulares medidas de choque económico, a menudo acompañadas de otras forma de shock no tan metafóricas: el golpe de la prra de los policías, las torturas con electroshocks o la picana en las celdas de las cárceles.En este relato apasionante, narrado con pulso firme, Klein repasa la historia mundial reciente (de la dictadura de Pinochet a la reconstrucción de Beirut; del Katrina al tsunami; del 11-S al 11-M, para dar la palabra a un único protagonista: las diezmadas poblaciones civiles sometidas a la voracidad despiadada de los nuevos dueños del mundo, el conglomerado industrial, comercial y gubernamental para quien los desastres, las guerras y la inseguridad del ciudadano son el siniestro combustible de la economía del shock.
Se ha afirmado que estamos en la era posmoderna. Estallido de lo social, disolución de lo político: el individuo es el rey y maneja su existencia a la carta... Este libro ausculta esta mutación esencial e investiga los rasgos significativos de los tiempos actuales, tan alejados de la rebelión y el disentimiento característicos de los años de expansión. Nuevas actitudes: apatía, indiferencia, deserción, el principio de seducción sustituyendo al principio de convicción, generalización de la actitud humorística. Nueva organización de la personalidad: narcisismo, nuevas modalidades de la relación social, marcadas en particular por la reducción de la violencia y la transformación última de sus manifestaciones. Nuevo estado de la cultura: agotamiento y derrumbe de lo que ha significado la vanguardia durante el siglo XX.
El autor atribuye el conjunto de estos fenómenos a un mismo factor: el individualismo es el nuevo estado histórico propio de las sociedades democráticas avanzadas, que definiría precisamente la era posmoderna.
«En la serie de textos publicados recientemente sobre el tema del individualismo, el libro de Lipovetsky es, sin duda, el más importante: el que llega más lejos en las descripciones, el que profundiza mejor las explicaciones. Un lenguaje preciso y galopante: el movimiento de las zapatillas de tenis que recorren los fast food y los grandes almacenes. Un lenguaje, además, abundante que se adhiere a los objetos apilados en los grandes supermercados o a los gestos acelerados de los vídeos de música pop» (C. Vigarello).
«Con La era del vacío y El imperio de lo efímero, Gilles Lipovetsky se ha convertido en una estrella de los analistas de la contemporaneidad» (Vicente Verdú).
El presente libro ofrece un excepcional estudio de los principales filósofos políticos del siglo XX. Según Michael H. Lessnoff es absurdo mantener que la filosofía política murió en el siglo XX. Con un análisis claro, inteligente y autorizado el autor demuestra que este siglo produjo toda una pléyade de filósofos políticos perfectamente comparables a los de época anteriores. La originalidad en teoría política siempre ha sido impulsada por nuevos problemas y crisis, de los que éste, el siglo más político de todos, no estuvo precisamente exento. Lessnoff examina las propuestas a las crisis políticas de ofrecidas tanto por escritores liberales como por neomarxistas, sin olvidar a pensadores más difícilmente clasificables, como Hannah Arendt y J. Habermas. Muestra también cómo las teorías políticas del siglo XX se constituyeron como reacción a fuerzas sociales e ideológicas profundamente arraigadas tales como la burocratización, la racionalización y el «desencanto». Herramienta fundamental para el estudiante de filosofía y de Ciencias Políticas, este libro será igualmente bien recibido por el lector interesado en el pensamiento político o en la historia de nuestro tiempo.