Por fin en papel y en castellano el famoso e inédito artículo que Karl Hess escribió para la revista Playboy en marzo de 1969 y que causó un gran impacto en los estatistas asiduos a la incónica revista erótica.
La historia de la brujería puede explicarse a través de la selección de un centenar de elementos y seres estrechamente vinculados con esa práctica milenaria: calderos, velas, árboles, cartas y animales que conforman una colección singular, como si de un museo o un cuarto de las maravillas se tratase. La historiadora Diane Purkiss acompaña esta serie de artefactos y símbolos de hechicería de una explicación detallada sobre el origen, el signifi cado y el empleo de cada elemento en la dimensión de lo oculto. Cada entrada, una por capítulo, ofrece además una ilustración del artista Ben Jones. El recorrido por este museo en formato de libro propicia la refl exión sobre el poder mágico de la cocina del mismo modo que elabora una historia de los amuletos e informa sobre otras tantas cuestiones. He aquí un ameno ensayo ilustrado sobre la sabiduría de esas mujeres a las que llamamos brujas y sobre un poder, el femenino, reprimido a lo largo de la historia, entre otros motivos, por asociarse a lo que no que siempre es visible o científi camente defensible o demostrable según la ciencia (o el dogma) de cada época.
Una definición sistemática del fenómeno del tecnopopulismo, y un análisis de sus inquietantes consecuencias para los regímenes democráticos. El análisis político suele distinguir entre los regímenes populistas y los gobiernos tecnocráticos, gerenciados por expertos. En esta obra notable, cuya influencia en la discusión contemporánea no ha dejado de expandirse desde su publicación, Christopher Bickerton y Carlo Invernizzi Accetti sostienen que esa dicotomía no da cuenta de la realidad política contemporánea: es más bien la fusión entre populismo y tecnocracia, el tecnopopulismo, la lógica subyacente a las democracias actuales. Estudiando tanto los que denominan casos de tecnopopulismo puro –el Nuevo Laborismo, el Movimiento Cinco Estrellas y la República en Marcha– como ejemplos híbridos –Podemos y la Liga Norte–, los autores muestran cómo, en los últimos treinta años, los proyectos políticos se han basado cada vez más en apelaciones simultáneas al pueblo y al saber experto, abriendo así una profunda brecha entre los ciudadanos y las instituciones que deberían representarlos.