En República mortal, el premiado historiador Edward J. Watts presenta una nueva historia de la caída de la República de Roma que explica por qué los ciudadanos romanos cambiaron la libertad por la dictadura. Durante siglos, al tiempo que Roma se convertía en la principal potencia militar y política del Mediterráneo, sus instituciones de gobierno, reglas parlamentarias y tradiciones políticas lograron fomentar la negociación y el compromiso. Sin embargo, a partir del año 130 a.C., dirigentes romanos como Sila, Pompeyo, Marco Antonio o Julio César empezaron a usar cada vez más las instituciones para buscar el lucro individual y obstaculizar a sus rivales, hasta que los enfrentamientos entre los políticos dieron paso a la violencia política en las calles. El terreno estaba abonado para unas guerras civiles destructivas y, al final, el reinado imperial de Augusto. Por encima de todo, la República romana enseña a los ciudadanos de nuestros días los peligros de consentir la obstrucción política y coquetear con la violencia. La historia de Roma demuestra con claridad que, cuando los ciudadanos miran hacia otro lado para no ver que sus dirigentes tienen comportamientos corrosivos, su república está en peligro de muerte.
Las ideas de Friedrich Nietzsche (1844-1900) ?el eterno retorno de lo mismo, la voluntad de poder, el superhombre o la concepción dionisiaca de la existencia? transformaron definitivamente la filosofía de su tiempo y continúan ayudando a entender el nuestro. A su vez, la atormentada existencia de este pensador, marcada por la enfermedad y el hundimiento final en la locura, ilustra la soledad del genio romántico. Para esta biografía, Safranski recorre los principales episodios vitales del autor de Así habló Zaratustra, dando así la clave de los enigmas e intuiciones de un autor que, más de cien años después de su muerte, mantiene todo su poder de provocación.
Una obra total sobre la experiencia de la guerra.
El aclamado historiador Antony Beevor vuelve a maravillarnos con su narración del Día D. Tras largos años de trabajo en archivos que sus predecesores no pudieron consultar (más de treinta, en media docena de países), ha escrito lo que nos parece una obra total sobre la experiencia de la guerra: los preparativos de la invasión de Normandía por las fuerzas aliadas, la disciplinada resistencia de los soldados alemanes, el enfrentamiento, terrible, en las cabezas de playa, el penoso avance en territorio francés con batallas tan eras como las que se libraban en el frente oriental, el calvario de los civiles franceses masacrados por ambos bandos, las miserables disensiones entre los jefes militares, o la visión, casi insoportable, de la exacción más terrible de la guerra: los heridos, los desnudos y los muertos.