«¡Hay un lenguaje, existe una palabra que vence a la muerte, y que es, pues, la expresión perfecta de la verdadera grandeza, de lo que la nobleza de espíritu puede conseguir! En cuanto volvamos a emplear ese lenguaje, el amor y el arte volverán a ser capaces de dar forma a la existencia humana. Y así se apagará, por fin, ese incendio que es la "fiesta mundial de la muerte", ese fuego que fue encendido a principios del siglo xx por los seguidores de Grandeza y la Gran Cantidad…»
El Tao Te Ching es uno de los libros más importantes y enigmáticos del pensamiento oriental. Obra fundacional del taoísmo, se trata de una recopilación de textos poéticos sutiles y de una riqueza inagotable que ofrecen una experiencia lectora y filosófica única.
Esta delicada edición ilustrada, siguiendo el precepto taoísta de wei wu wei («hacer-no-haciendo»), permite explorar una obra en la que las palabras de su autor siguen teniendo la misma fuerza que cuando fueron escritas hace dos mil quinientos años.
Caballero entre los caballeros, poeta entre los poetas, donjuán entre los donjuanes, tahúr entre los tahúres de burdel. Tan exquisito como insidioso en la palabra. Tan arriesgado como apasionado en los dormitorios ajenos. Tan hábil como excesivo con los naipes. Tan gallardo montando a caballo como implacable alanceando toros, hasta el punto de que inventaron para él, según dicen, la expresión de «picar demasiado alto». Don Juan de Tassis, conde de Villamediana, escribió su propia leyenda en el Siglo de Oro: la de un caballero español cuya fama, de Flandes a Roma y de Nápoles a París, traspasó todas las fronteras.