«A la espera de Dios» es expresión de la actitud atenta y vigilante, pero también del carácter siempre inacabado de una búsqueda exigente de verdad, como la obra y la vida de Simone Weil. Las cartas y ensayos reunidos en este volumen y publicados póstumamente en 1949 fueron escritos entre enero y junio de 1942 y recogen muchas de las claves que marcan la obra de Weil: radicalidad desconcertante, probidad y coherencia intelectuales, amor y profundo conocimiento de los clásicos griegos, identificación con los vencidos, vocación «católica» de simpatía con todos los hombres, experiencia mística...
En el siglo vi d. C., Oriente Próximo estaba dividido en dos grandes imperios: el romano y el persa. Cien años después, el romano ya no existía y el persa había quedado fragmentado. Esta época en declive, caracterizada por las pugnas territoriales y religiosas, abrió camino al origen, forja y triunfo de un nuevo imperio global y, con él, una nueva religión universal: el islam.
El reconocido escritor Tom Holland nos transporta a un mundo antiguo convulso y trepidante para descubrirnos una de las narraciones más arrolladoras y trascendentales de la historia humana. Rastreando las fuentes más primarias sobre su procedencia, responde a las incógnitas sobre el nacimiento y los ideales que promueve el islam, y nos muestra cómo los árabes llegaron a forjar un dominio asombrosamente vasto en cuestión de décadas, creando una civilización imperial cuyos aspectos perduran hasta nuestros días.
¿Qué sería del pensamiento si mujeres como Penélope, Deméter, Diotima o la memorable sirvienta tracia pudieran tomar la palabra y decir qué y quiénes fueron? ¿Cómo concebiríamos el cuerpo, la sexualidad, la identidad y el poder si ellas se convirtieran en las protagonistas de la peripecia filosófica? En un enfrentamiento cuerpo a cuerpo con su 'enemigo' Platón, Adriana Cavarero propone una relectura de algunas de las figuras femeninas de la Antigüedad para denunciar las desigualdades de género y las dinámicas patriarcales sobre las que se cimenta el canon filosófico occidental. Con un estilo cáustico y brillante, la autora prefigura una nueva manera de pensar el espacio público, en un diálogo ideal con los movimientos feministas italianos e internacionales.