A lo largo de los siglos, el ser humano ha experimentado con las posibilidades estéticas y expresivas del lenguaje, y las ha puesto al servicio de la dimensión primordial de la vida cotidiana y la historia de los pueblos a través del arte de contar. En esta obra imprescindible, Francisco Rico indaga en diversos géneros medievales para comprender las raíces de la literatura española. Su historia no es unívoca ni lineal; formas como la canción trovadoresca, los cantares de gesta o la poesía didáctica florecieron a raíz del contacto directo con otras tradiciones. Nuestra literatura creció desde el principio enlazada a otras culturas.
El primer siglo de la literatura española es un análisis exhaustivo del modo en que las actitudes primarias y universales del ser humano se reflejan en el desarrollo de nuestras letras y nos permiten entender sus orígenes más inciertos.
Mientras los seres humanos convivan, será necesaria la política. Maquiavelo, que lo sabía por su experiencia en el gobierno de la Florencia renacentista, escribió este tratado para analizar el modo en que los gobernantes consiguen el poder y lo conservan. Con ejemplos históricos, expone una filosofía política en la que el valor de las acciones se define a partir de su eficacia, inaugurando un realismo que se aleja de las corrientes moralistas y utópicas de su época.