Historia de Madagascar nos presenta un relato accesible que integra los resultados de las investigaciones más recientes con el propósito de facilitar el conocimiento de la realidad malgache. A su llegada, los primeros ocupantes de la Isla Grande poblaron las costas y algunos se trasladaron poco a poco hacia el interior. Siguió una fase de construcción política, al ?nal de la cual una de las formaciones resultantes, impulsada por un sueño uni?cador, sería reconocida como Reino de Madagascar. Su fracaso, que se resumió en la colonización, no rompió la eterminación de la población. La independencia ha abierto al ?n la vía a un proceso largo y complejo: la búsqueda de la democracia y del desarrollo. La obra describe así la marcha de un pueblo hacia su unidad. Esta historia reconstruye el recorrido de Madagascar, en su continuidad y en sus rupturas. Relativiza el enfoque convencional de un origen de los malgaches, a favor de una integración progresiva en el Océano Índico y de una apertura creciente al mundo.
Tito Livio es el único de los grandes historiadores de Roma que se mantuvo alejado de la vida pública. Eso le permitió dedicarse varias décadas a escribir su gran obra Historia de Roma (Ab urbe condita). Este monumental proyecto constaba de ciento cuarenta y dos libros, de los cuales solo se conservan treinta y cinco. La parte que ha llegado hasta nosotros refleja los mejores momentos de la Roma heroica con una prosa de innegable encanto en la que se exaltan las virtudes republicanas y el amor por la libertad.
El segundo volumen de Historia de Roma recoge los libros IV-VII, que abarcan los años 445-342 a. C. Es un periodo de constante evolución que bascula, por un lado, entre las luchas contra otros pueblos (ecuos, volscos, galos, etruscos, samnitas) por abarcar más territorio o recuperarlo, y, por otro, los progresos políticos y sociales que se van afianzando en el seno de la sociedad romana.
Tito Livio es el único de los grandes historiadores de Roma que se mantuvo alejado de la vida pública. Eso le permitió dedicarse varias décadas a escribir su gran obra Historia de Roma (Ab urbe condita). Este monumental proyecto constaba de ciento cuarenta y dos libros, de los cuales solo se conservan treinta y cinco. La parte que ha llegado hasta nosotros refleja los mejores momentos de la Roma heroica con una prosa de innegable encanto en la que se exaltan las virtudes republicanas y el amor por la libertad.
Este tercer volumen de Historia de Roma reúne los libros VIII-X, y en ellos se culmina el proceso de asentamiento del dominio romano en el centro de la península hasta llegar al Adriático. Es una conquista territorial que se desarrolla a costa de las victorias sobre los samnitas, y que, como analiza Tito Livio, también lleva consigo un aumento de complejidad en el gobierno y un cambio de paradigmas sociales de gran calado.