Louis lo había comprobado: el gato estaba muerto, y por eso lo había enterrado. Aun así, incomprensiblemente, el gato había vuelto a casa.
Church estaba allí otra vez, como Louis Creed temía y deseaba. Porque su hijita Ellie le había encomendado que cuidara del gato, y Church había muerto atropellado. Louis lo había comprobado: el gato estaba muerto, incluso lo había enterrado más allá del cementerio de animales. Sin embargo, Chruch había regresado, y sus ojos eran más crueles y perversos que antes. Pero volvía a estar allí y Ellie no lo lamentaría.
Louis Creed sí lo lamentaría. Porque más allá del cementerio de animales, más allá de la valla de troncos que nadie se atrevía a traspasar, más allá de los cuarenta y cinco escalones, el maligno poder del antiguo cementerio indio le reclamaba con macabra avidez...
La extraordinaria historia de la mujer que escribió en la sombra algunas de las obras más importantes del siglo XX.
Por la autora de Mujeres que compran flores.
La fascinante aventura de una mujer silenciada por la historia oficial... hasta ahora.
Cuando a la directora teatral Noelia Cid le encargan estrenar Sortilegio, la obra perdida del reputado dramaturgo Gregorio Martínez Sierra, decide informarse sobre ella a traves de los documentos que conservó su mujer, María Lejárraga. Sin embargo, mediante su investigación Noelia no sólo se sumerge en la compleja relación amorosa entre María y Gregorio, sino que va a encontrarse con un misterio que lleva más de un siglo sin resolver.
Esta novela trata con especial habilidad uno de los temas más importantes en la narrativa de Grazia Deledda: el deshacerse, la progresiva decadencia, la desaparición. El ambiente que se nos presenta en la casa de los Decherchi entronca con la situación decadente de muchas familias de la nobleza italiana rural, las cuales, incapaces de adaptarse a los nuevos tiempos, dilapidan los restos de su menguado patrimonio en fastos vanos y ocurrencias estériles. En medio de este contexto melancólico, se nos presenta a Annesa, criada e hija adoptiva de la familia Decherchi, que sufrirá con esta los errores y las faltas de Paulu, un heredero joven, prematuramente consumido e incapaz de encontrar su lugar en un mundo en continua transformación. "La hiedra" dibuja, pues, con líneas cuidadas y bien definidas, la historia de un personaje profundamente marcado por su conflicto interior, y que perseguirá el amor mientras se enfrenta a una difícil y opresiva circunstancia vital.
Cuando la estudiante de literatura Anastasia Steele recibe el encargo de entrevistar al exitoso y joven empresario Christian Grey, queda impresionada al encontrarse ante un hombre atractivo, seductor y también muy intimidante. La inexperta e inocente Ana intenta olvidarle, pero pronto comprende cuánto le desea.
Grey está atormentado por sus propios demonios y le consume la necesidad de controlarlo todo, pero a su vez se ve incapaz de resistirse a la serena belleza de Ana, a su inteligencia y a su espíritu independiente. Debe admitir que la desea, pero bajo ciertas condiciones.
Cuando la pareja por fin inicia una apasionada relación, las peculiares prácticas eróticas de Grey desconciertan a Ana, al tiempo que ella descubre los límites de sus propios y más oscuros deseos...
Cuando la vida se detiene de golpe, es el momento de hacer memoria. Es eso lo que siente Noray ante la inesperada muerte de sus abuelos Carmen y Tomás. Tras su funeral, incapaz de afrontar la ausencia de quienes le enseñaron las muchas formas que tiene el querer, se encierra en la casa familiar del pueblo, donde creció y fue feliz. Allí se refugia en las palabras y decide enfrentarse a la novela que lleva años postergando: la historia de su familia, ligada a la de un país con demasiado temor a conjugar el pretérito, desde la guerra civil hasta la consolidación de la democracia. A través de la escritura, Noray evocará las vidas de aquellos que hicieron posible la suya y lidiará con sus peores miedos y fantasmas para tratar de descubrir quién es.
Esta historia llegará sin que ella lo sepa a manos de Ismael, el amor de su vida, que irá leyendo, en la habitación de un hospital, las páginas de ese relato cuyo final marcará para siempre el destino de ambos.
Un genio ruso del siglo XX escribe sobre un genio ruso del siglo XIX. Nabokov aborda la figura y la obra de Gógol con perspicacia y erudición. Perfila su vida, lo sitúa en el contexto de la literatura rusa y, al abordar su producción literaria, se centra sobre todo en sus tres obras maestras: El inspector, Almas muertas y El abrigo. Su conclusión es que la superlativa literatura de Gógol se sustenta no tanto en los argumentos de sus libros como en el manejo del lenguaje y la forma. Nabokov hace una lectura iluminadora de quien para el es "el más extraño poeta en prosa que jamás produjo Rusia". Y a traves del análisis de los textos de su compatriota, reflexiona sobre unos planteamientos esteticos y un modo de entender la literatura que son los que el reivindica y utiliza en su propia narrativa. El Nabokov ensayista complementa y enriquece al Nabokov novelista.