Michael y Caitlin se encuentran secretamente desde hace veinticinco años en su paraíso particular: Coney Island. Unas preciadas horas juntos que programan una vez al mes y que son un bálsamo para la insatisfacción y el tedio de sus fríos matrimonios, del rutinario trabajo, de una familia distante e, incluso, de un país que los vio crecer y que ahora sienten lejos. Sin embargo, fuera de las cuatro paredes de esta modesta habitación de hotel hay un mundo que amenaza con separar sus caminos para siempre.
Una lectura compulsiva, un fresco de dos vidas y una decisión que ya no se puede retrasar se despliegan en el transcurso de unas horas, y una reflexión sobre la crisis de la madurez: qué pasa cuando desaparece la ilusión de la juventud y se cae en el conformismo.
La reconocida dibujante Barbara Stok retrata en esta obra la vida de Hiparquía, una filósofa prácticamente desconocida que vivió en la Grecia del siglo IV a. C. y que revolucionó el mundo del pensamiento clásico gracias al importante rol que desempeñó en la corriente cínica. Con su eterno entusiasmo, un potentísimo trasfondo filosófico y su estilo característicamente cercano, Stok construye un puente con el presente al colocar un espejo frente al lector.
Esta novela gráfica logra devolver el lugar destacado de la Historia que le corresponde a la figura de Hiparquía, una mujer brillante que tuvo el coraje de vivir según sus propios ideales, a pesar de las creencias predominantes de su época.
Ernesto va a cumplir sesenta años y para los telediarios ya es considerado un anciano. Reacio a dejarse aplacar por el desánimo, emprende un viaje al pasado en busca de las claves para el futuro. Entre Mallorca y Barcelona, y entre pensamientos y recuerdos, el protagonista reflexiona sobre el paso de los años y sus consecuencias. Rememora conversaciones de sobremesa con sus amigos, en las que se recogían las preocupaciones de una generación frustrada por todas las promesas que su juventud auguraba, pero no cumplió.
Con Lola, Héctor y Rita, y César, Ernesto comparte todas las inquietudes y pérdidas de una generación sobrepasada, pero también el anhelo de disfrutar de los años que les quedan en un mundo que no se adivina tan feliz como pensaban.
Jeff Atman, un periodista londinense de mediana edad, está en Venecia para cubrir la inauguración de la Bienal de arte. Espera encontrar lo habitual en estos casos: obras de arte incomprensibles en medio de un ambiente festivo en el que abundan el alcohol y las drogas. Lo que no se imagina es que conocerá a Laura, su alma gemela, con la que vive una intensa aventura erótica que convertirá su estancia en la ciudad en algo inusitado.
Otra ciudad, otro encargo. Esta vez Jeff viaja a Benarés para cubrir el ritual funerario de los cadáveres a orillas del Ganges. Rodeado de masas de gente, animales, pobreza y caos, a Jeff le espera una transformación completamente diferente.
René, un anciano transgénero que tocaba el piano en cabarets, pasa los últimos momentos de su vida postrado en una cama bajo la estricta vigilancia de Olga, una enfermera con la que rememora días de militancia, y viejos amores y amistades.
Ahora, a sus noventa y tres años, echa la vista atrás para evocar tanta vida compartida y duramente conquistada: las revueltas de Stonewall, la represión policial, décadas de activismo por los derechos de la comunidad LGTBIQ+, los estragos de la irrupción del sida, que tantos amigos se llevó, los cuidados entre personas que comparten la marginación... ¿Adónde ha ido a parar tanto esfuerzo, si siguen oyéndose voces intolerantes que amenazan con derrumbarlo todo? René sabe que su lucha y la de sus amigas no ha cesado: lo que empezó en los años sesenta sigue en la era Trump.
¿Qué ocurre con la carrera de grandes artistas y atletas cuando llegan a la vejez? ¿Alcanzan una serenidad renovada o sucumben al tormento? A medida que nuestro cuerpo y nuestra mente se deterioran, ¿cómo seguir adelante?
Geoff Dyer reflexiona sobre las secuelas del paso del tiempo y se fija en los últimos días de grandes escritores, pintores, futbolistas, músicos y estrellas del tenis (sí, también Roger Federer). Con un tono mordaz y una lucidez inigualables, Dyer nos acerca a momentos críticos de genios que cedieron física o mentalmente cuando sus carreras alcanzaron la cúspide o que se reinventaron desafiando las convenciones. Entre su exquisita selección, Dyer nos confía el deterioro mental de Nietzsche, los nuevos sonidos que Dylan encontró tras una crisis creativa, las últimas pinturas con cierto aire abstracto de Turner, la brillante pluma de Jean Rhys en su madurez y los mágicos cuartetos finales de Beethoven.
SI LA MAGIA HABITA EN ALGÚN LUGAR, ES ENTRE LAS ESTRELLAS…
Vega ha vivido en el valle durante toda su vida. Su madre le prohibió abandonar la seguridad de sus límites por las amenazas desconocidas que la aguardan en las tierras agrestes que hay más allá. Sin embargo, tras su muerte, Vega comienza a ver estrellas caer del cielo. Es un augurio que no puede ignorar y se ve obligada a abandonar la protección de las paredes del valle. Sin embargo, el mundo exterior resulta ser más aterrador de lo que había imaginado. La gente está gravemente enferma: pierden la vista y el oído antes de perder la vida.
El secreto que guarda Vega es que ella es la única que alberga el conocimiento de las estrellas. Un conocimiento que podría contener la clave para encontrar la cura. Por eso, cuando se desata el caos, las amenazas de las que su madre le advirtió se vuelven demasiado reales. Vega teme por su vida, pero una chica llamada Grillo la rescata y la lleva hasta Noah, un joven marcado con sus propios tatuajes misteriosos.
Mientras escapan de los hombres que la persiguen, Vega, Grillo y Noah cruzarán las llanuras en busca de la cura de la que hablan las estrellas. Sin embargo, a medida que las líneas que separan la amistad y el cautiverio comienzan a difuminarse, Vega deberá decidir si salvaguardar el conocimiento sagrado de las estrellas o arriesgarlo para intentar salvarlos a todos.
¿Es cierto que los hijos de Joseph Goebbels fueron asesinados en el búnker del Führer? ¿Es cierto que fue su propia madre, Magda, quien los mató poco antes de quitarse la vida? ¿Y si no fue así?
Ignacio Padilla juega con la posibilidad de que los seis niños pudieran haber salido con vida del búnker. No sólo eso, imagina los destinos que cada uno pudo haber vivido y sus identidades reconstruidas ya siendo adultos. Alguna podría haber vivido en el puerto de Malombrosa (el puerto imaginario de su Espiral de artillería) o en Argentina. Quizás uno de los pequeños escapó por una serie de túneles que lo alejaron de una muerte segura. Una de las hijas, tal vez, se convirtió en una promesa de los escenarios, en una prima donna.
Una novela ingeniosa y encantadora de Herve Le Tellier que explora la naturaleza del amor a partir de los cuarenta al más puro estilo de Woody Allen. Anna y Louise podrían ser hermanas, pero no se conocen. Las dos están casadas, son madres y son razonablemente felices en sus relaciones de pareja. Casi el mismo día, Anna se cruza con un escritor, Yves, y Louise conoce a Thomas. Sus vidas van a verse completamente alteradas por la deliciosa e inconveniente llegada del amor. Con 40 años todavía es posible caer rendido al amor y reescribir el propio destino, pero ¿a que precio? Provocadora, sofisticada y, por encima de todo, divertida y entretenida, No hablemos más de amor explora la euforia del deseo a través de las trayectorias de sus personajes.