Había una vez una niña muy buena llamada Wendy, que tenía tres hermanitos, y para que éstos se durmieran solía contarles historias muy bonitas. La noche en que comienza nuestro cuento les contaba las aventuras de Peter Pan. Siempre está haciendo buenas obras, y sabe volar, y le acompaña Campanilla, que es una niña con alas de mariposa, tan pequeña que cabe en la palma de la mano, y además vive en un país maravilloso, que se llama la isla de Nunca Jamás...
Así empieza la historia fantástica de Peter Pan y Wendy, la creación literaria más conocida de Barrie. La mayoría de críticos opina que lo que realmente quería comunicar el autor escocés con su obra era la necesidad de no olvidar al niño interior que todos llevamos dentro.
El escritor escocés JAMES MATTHEW BARRIE, conocido como J. M. Barrie, nació en Kirriemuir, al norte de Escocia, el yg de mayo de 1860. Entre 1873 y 1878 asistió a la Dumfries Academy, donde realizó sus estudios. Al terminar, se inscribió en la Universidad de Edimburgo, donde colaboró con el periódico Edinburg Evening Courant hasta que finalizó - sus estudios superiores en 1882. En 1922, el rey Jorge V le concedió la Orden del Mérito, que anteponía la palabra «sir» a su nombre, «en reconocimiento a sus servicios ala Literatura y al Teatro». Barrie murió de neumonía el 19 de junio de 1937 y está enterrado en Kirriemuir junto a sus padres.
Las peleas de pandillas en los Estados Unidos quedan de lado contra un objetivo común: el racismo, la injusticia social y los excesos policiacos, pero, ¿qué tanto podrán Creeds y Bloods dejar su orgullo de lado en pos de una protesta en común? La violencia se desbordó desde los barrios marginados de Los Ángeles en 1992 a consecuencia de los excesos policíacos durante el arresto del afroestadunidense Rodney King. Sofocadas por la Guardia Nacional al cabo de seis días, las protestas arrojaron un saldo de 63 muertos, más de 2,000 heridos, 7,000 mil incendios y daños a 3,100 establecimientos.
Desagüe recorre la historia del Valle de México y sus aguas: el asedio de Tenochtitlan, el desarrollo de la capital de la Nueva España, el megaproyecto del Gran Canal del Desagüe en el porfiriato, y la relación de la Caja Colectora con los habitantes de la Ciudad de México contemporánea. Diego Rodríguez Landeros documenta la relación de la capital mexicana y el agua a través de los años; tanto en un sentido histórico, como en uno más íntimo.
El invitado de Drácula y otros relatos, es una recopilación de narraciones cortas. Su mujer Florence publicó en 1914 una edición póstuma dos años después de la muerte de Stoker. Se cree que inicialmente El invitado de Drácula fue escrito para ser el capítulo uno de la novela Drácula, pero los editores no lo consideraron oportuno y optaron por no incluirlo.
Aparte de El invitado de Drácula, están los siguientes relatos: La casa del juez, La Squaw, El secreto del oro creciente, Una profecía gitana, La venida de Abel Behenna, El entierro de las ratas, Un sueño con manos rojas y Arenas de Crooken.