Un legado invaluable que nos invita a seguir leyendo, escribiendo y soñando.
A mitad de la noche la vida parece encontrar su desenlace, pero es justo en la mayor oscuridad cuando comienza a manifestarse la luz que precede al amanecer: ese momento en que las tinieblas quedan atrás y emerge el día con la incertidumbre propia de un nuevo comienzo. «El tiempo abre las alas» y «se aleja el día hacia ninguna parte... empezaste a morir y a darte cuenta de que el misterio no va a extenuarse nunca. El despertar es un bosque donde se recupera lo perdido y se destruye lo ganado. Y el día futuro, una miseria que te encuentra a solas con tus pobres palabras».
Una novela única, ligera y honda a la vez, que indaga en las posibilidades del género para hablar sobre el cuerpo, el mundo y las estrategias siempre insuficientes con que intentamos cartografiarlos.
Este es un libro inquieto e inquietante, hecho de «historias incompletas, cuentos oníricos» subsumidos en un libérrimo cuaderno de viaje a base de excursos, apuntes, narraciones y recuerdos que muchas veces tienen como tema el viaje mismo: así, el relato de Kunicki, que tendrá que enfrentarse a la desaparición de su esposa y su hijo, y a su reaparición enloquecedoramente enigmática. O el de Annushka, obsesionada por comprender los incomprensibles juramentos que profiere una pedigüeña. Y también el relato real de cómo el corazón de Chopin llegó a Polonia escondido en las enaguas de su hermana; o el del anatomista Philip Verheyen, que escribía cartas a su pierna amputada y disecada; cartas como las que le mandaba Josefine Soliman al emperador de Aus-tria para recuperar el cuerpo de su padre, disecado como la pierna de Verheyen e infamantemente expuesto en la corte donde había servido en vida.
Los Escorpiones es una novela de novelas: una obra narrativa titánica y misteriosa. Los protagonistas, Sara y Thomas, se ven envueltos en el entramado de una teoría de la conspiración dirigida por los poderes políticos y económicos, que pretenden controlar a los individuos a través de la hipnosis y los mensajes subliminales en libros, videojuegos y música para inducirlos al suicidio. Ambos llevan a cuestas desequilibrios emocionales y, mientras se teje entre ellos una relación inclasificable y poderosa, deciden investigar sobre esta secta cuyo nombre es el de una de las pocas especies animales que prefiere matarse antes que seguir soportando el dolor.
Desde la Italia de los años veinte, pasando por el sur profundo de Estados Unidos en los ochenta, hasta llegar a la época actual en Madrid, Bilbao, un pueblo perdido de la España rural y Nueva York, esta es una historia sobre la angustia existencial, la soledad y la necesidad de creer en algo, sea lo que sea, para encontrar el sentido a la vida.
A partir de un aparente robo de la cabeza de cera de la Princesa de Lamballe del Museo Grévin, Victor B., fotógrafo del museo, ve una serie de hechos sin sentido desencadenarse en torno a este personaje, asesinado durante la Revolución francesa. París cae sumida ante la incertidumbre y la obsesión, todo esto se refleja en el rodaje de una película sobre esta princesa. Poco a poco el comportamiento de los involucrados se irá tornando más extravagante y enfermo, lo cual resultará en crimen obsesivo y enfermo, en el que la historia de las masacres se repetirá con un sentido distorsionado.
Elfriede Jelinek, continuadora de la tradición sarcástica austríaca, la de HOrvath, Karl Kraus y Thomas Bernhard, denuncia en Los excluidos -título que se relaciona con Los secuestrados de Altona, de Sartre- la dificultad de la vida sin complejos de la Austria posbélica, deseosa de ignorar los crímenes del nazismo. Dicha premisa se plasma en la ficción a través de la historia de tres estudiantes de bachillerato y un ambicioso muchacho de clase obrera que asaltan a los transeúntes para robarles. A la determinación de una sociedad decidida a olvidar el pasado y en la que el triunfo social se convierte en el valor supremo, los cuatro adolescentes responden con el disgusto y el odio.
Una épica historia de amor inspirada en el clásico Cumbres borrascosas, ambientada en el despiadado mundo del patinaje artístico de élite y con una protagonista decidida a labrarse su propio camino dentro y fuera del hielo.
«Todo el mundo cree que Heath Rocha fue mi primer amor. No es cierto. Mi primer amor fue el patinaje artístico».
Katarina Shaw siempre ha sabido que estaba destinada a llegar a lo más alto. Cuando conoce a Heath Rocha, un chico solitario, su conexión instantánea los convierte en un dúo formidable sobre el hielo... Hasta que un impactante incidente en los Juegos Olímpicos los separa definitivamente.