De la pluma del autor superventas Owen King, llega una nueva novela de fantasía dickensiana en la que los gatos son considerados dioses, los ladrones son nobles, los eruditos son radicales y los conjuradores son los criminales más magníficos que puedas imaginar.
***Uno de los mejores libros de ciencia ficción de 2023 según la cadena de librerías Waterstones***
Para la joven Dora, una asistenta en la universidad, la revolución trae consigo la liberación. Pasa a frecuentar la compañía de uno de los estudiantes más radicales, Robert, y al fin puede investigar lo que le sucedió a Ambrose, su hermano, en el Instituto de Investigación Psíquica justo antes de morir.
No obstante, a Dora se le encarga cuidar de otra institución, el Museo de los Trabajadores: un extraño y olvidado edificio ocupado por figuras de cera de mineros, enfermeras, dependientes...
Madrid, invierno de 1938
Clotilde, una artista gráfica que dibuja caricaturas para los diarios republicanos, asiste en Madrid a los últimos meses de la Guerra Civil. La caída de la República es inminente, por lo que su marido, militante comunista que trabaja para los rusos, decide enviar a Moscú a su hijo Pablo, de tan solo cinco años, en contra de su voluntad. Clotilde se resiste con todas sus fuerzas, pero no logra evitar que el comandante Borís Petrov emprenda ese arriesgado viaje por una España en llamas para cumplir con el deseo de su camarada de llevar a Pablo a la Unión Soviética, donde Stalin está levantando un nuevo país sobre las ruinas del antiguo régimen.
Moscú, primavera de 1939
Allí es recibido por su nueva familia que, conmovida por su trágico exilio, acoge con afecto a un niño exhausto y enfermo. Anya no duda en cuidar de Pablo como si fuese su propio hijo, sin hacer distinciones con Igor, su hermano de adopción. Hija y esposa de dos orgullosos héroes de la Revolución -su padre luchó junto a Lenin, su marido a las órdenes de Stalin-, Anya ama la poesía y la música, aficiones sospechosas y burguesas a los ojos del poder. Mientras sus ilusiones naufragan en el ambiente cada vez más opresivo del terror estalinista, su espíritu se rebela contra la injusticia, la miseria, la ausencia de libertad y el Gulag.
Es difícil encontrar a alguien que te dé trabajo sin preguntar demasiado sobre tu pasado. Así que le agradezco al universo que, milagrosamente, los Garrick me hayan dado empleo limpiando su impresionante ático con vistas a todo Manhattan y preparándoles comidas sofisticadas en su inmensa cocina. Puedo trabajar aquí durante un tiempo, ser discreta hasta conseguir lo que quiero.
Es casi perfecto. Sin embargo, todavía no he conocido a la señora Garrick ni he podido ver lo que hay dentro de la habitación de invitados. Estoy segura de que la oigo llorar. Veo las pequeñas manchas de sangre en el cuello de sus camisones blancos cuando hago la colada. Y, un día, no puedo evitar llamar a su puerta. Cuando esta se abre lentamente, lo que veo lo cambia todo...