Los comerciantes de la muerte fue un auténtico best seller de su tiempo. Uno de los grandes clásicos revisionistas con respecto a la Primera Guerra Mundial: una investigación sobre aquellos que hicieron posible que se activara la gran maquinaria de matar. Los comerciantes de la muerte fue, en muchos sentidos, el manifiesto de una generación de personas que juraban que no habría ni podría haber otra guerra de este tipo. La obra plantea un ataque sutil y riguroso, pero apasionado, contra aquellos que usaron el Gobierno para beneficiarse a expensas de la vida y la propiedad de otras personas.
Este libro es un maravilloso ejemplo de lo que Rothbard llamó la «vieja derecha». No solo denuncia la maquinaria de la guerra, sino que además nos brinda una fascinante historia de la especulación bélica. ¿Por qué relanzar Los comerciantes de la muerte a casi un siglo de su publicación original? Los especuladores belicistas están ganando en estos tiempos más dinero que nunca antes. Se están beneficiando del conflicto de un modo que no tiene precedentes. Lo que cuentan Hanighen y Engelbrecht no solo ha vuelto a suceder, sino que ha empeorado con creces. Por tanto, este tratado es más necesario que nunca.
Los dragones del Edén es ya todo un clásico, fue publicado por vez primera en 1977 y galardonado con el premio Pulitzer. Casi cuarenta años después, conserva toda su frescura e interés. En una impresionante ojeada panorámica que abarca desde la prehistoria hasta la época actual, Carl Sagan explica la evolución intelectual y mental del ser humano, habla de nuestros antepasados y sus antagonistas, describe la mecánica de nuestro cerebro y la de otros animales y dilucida el papel que han desempeñado los ordenadores en el conocimiento de los mecanismos de nuestro cerebro y en el almacenamiento de la información en nuestra memoria. Hallamos también en estas páginas fascinantes incursiones en los terrenos del mito y la leyenda, así como atrevidas especulaciones sobre los cauces futuros por los que parece va a discurrir la evolución del hombre.
Isaac Asimov dijo de este libro: «Carl Sagan posee el toque del rey Midas. Nunca había leído hasta ahora un relato tan interesante y cautivador sobre el tema de la inteligencia humana.»
A través de cientos de entrevistas y material inédito, Jimmy Soni nos relata la historia de los pioneros de Paypal (Elon Musk, Amy Rowe, Peter Thiel y Julie Anderson, entre otros), considerados la red más poderosa de la industria tecnológica y fundadores de gran parte de lo que conforma nuestro mundo actual.
A pesar de toda su influencia, la historia de los inicios de esos ‘fundadores’ no ha sido apenas contada.
Este ensayo transita a lo largo de cinco siglos de descubrimientos en el mundo vegetal a traves de las extraordinarias vidas de naturalistas, genetistas y botánicos apasionados por las plantas, los árboles, la agricultura y la genetica. Por ejemplo, Charles Darwin, que identificó una especie de mariposa que sólo podía polinizar un tipo de orquídea. O Leonardo da Vinci, que se dedicó a estudiar la filotaxis, la disposición de las hojas en el tallo de una planta para captar la luz del sol. Y cómo no mencionar la trágica historia del genetista ruso Nikolái Ivánovich Vavílov, que aisló en su laboratorio el supergrano de trigo que alimentaría a millones de campesinos sólo para caer víctima de las purgas de Stalin y morir en una de sus prisiones.
No hay prácticamente ningún tema de los importantes que no se trate en este libro: la vida y la conciencia, el espacio y el tiempo. Y el modo en que el momento que nos toca vivir nos obliga a repensar casi todo lo que creíamos saber acerca de nosotros mismos y del universo.
Los límites del capital es seguramente el gran texto fundacional de la llamada geografía crítica y también una de las obras mayores de David Harvey. Camuflado como un comentario de la obra de Marx, el autor nos va descubriendo, en estas páginas, algunos de los vacíos de la aproximación marxista a la hora de afrontar las dimensiones espaciales de la acumulación de capital. Sobre la base de algunas de las categorías de Marx, como 'capital ficticio', 'renta' o 'desarrollo desigual', Harvey fundamenta el análisis de un campo teórico en el que la dimensión territorial del capitalismo adquiere una nueva centralidad. El espacio aparece, de este modo, como uno de los elementos fundamentales en el diseño capitalista, tanto como instrumento para la acumulación que como fuente de nuevas contradicciones. La teoría de la crisis, centro de la formulación marxista del capital, se ve así completada por toda una nueva batería de conceptos.