La novela abarca la historia de un joven gascón, llamado D’Artagnan, que viaja a París para formar parte del cuerpo de los mosqueteros, en la época del reinado de Luis XIII. Tres mosqueteros, junto con D’Artagnan, se enfrentan al primer ministro, el cardenal Richelieu, para salvar el honor de la reina Ana de Austria. En el relato se destaca la lealtad, la amistad y la valentía como valores básicos de una persona.
En otros tiempos, un heroe se alzó para salvar la humanidad. Fracasó. Desde entonces, el mundo es un erial de ceniza y niebla gobernado por un emperador inmortal conocido como el lord Legislador.
Pero la esperanza perdura. Una nueva revuelta cobra forma cimentándose en la treta definitiva: la astucia de un brillante genio del crimen y la determinación de una heroína insólita, una joven ladrona callejera que deberá aprender a controlar el poder de los nacidos de la bruma.
Arrakis: un planeta desértico donde el agua es el bien más preciado y, donde llorar a los muertos es el símbolo de máxima prodigalidad.
Paul Atreides: un adolescente marcado por un destino singular, dotado de extraños poderes y, abocado a convertirse en dictador, mesías y mártir.
Los Harkonnen: personificación de las intrigas que rodean el Imperio Galáctico, buscan obtener el control sobre Arrakis para disponer de la melange, preciosa especia y uno de los bienes más codiciados del universo.
Los Fremen: seres libres que han convertido el inhóspito paraje de Dune en su hogar, y que se sienten orgullosos de su pasado y temerosos de su futuro.
ROMA LO EXIGE TODO.
EN ROMA TODO ESTÁ EN VENTA.
MALDITA SEA POR SIEMPRE ROMA.
Mare Internum, año 75 a. C. Un barco mercante navega rumbo a la isla de Rodas. A bordo, Julio César acompañado sólo por su fiel Labieno. Obligado por sus enemigos a exiliarse de Roma, se dirige al encuentro con el maestro Apolonio para aprender oratoria y de este modo, a su regreso, iniciar una feroz pugna para ingresar en el Senado y enfrentarse allí al temido Cicerón.
Así arranca la extraordinaria segunda entrega de la saga dedicada a Julio César por Santiago Posteguillo. En Maldita Roma encontraremos ya al mito en la plenitud de su talento político y militar, dispuesto a vencer cualquier obstáculo en su imparable conquista del poder.
Este es un relato sin tregua en el que viviremos ataques piratas, el enfrentamiento con Espartaco en la rebelión de los esclavos, grandes batallas en las que sentiremos el olor de la sangre y el estruendo de los gladios. Comprenderemos los hábiles manejos de César para ascender en política y asistiremos, incluso, al nacimiento de la reina Cleopatra a orillas del Nilo.
Una novela magistral que nos habla sobre el auténtico precio del poder. Y es que Julio César está a punto de aprender que Roma lo exige todo, hasta su bien más preciado, lo único que él no está dispuesto a entregar. Pero Roma no negocia con nadie. Ni con César. Maldita Roma.
«La oscuridad viene a por nosotros, Célie. Y también viene a por ti».
Han pasado seis meses desde que Célie pronunció sus votos sagrados y se unió a los Chasseurs como la primera cazadora en sus filas. Con su prometido Jean Luc como capitán, está decidida a afianzarse en su nuevo rol y proteger Belterra como no pudo hacer con su hermana. Pero los susurros del pasado continúan persiguiéndola, y un nuevo mal se está alzando.
A pesar de que sus amigos y su prometido han intentado protegerla de la oscuridad, ni su magia, ni sus espadas y ni siquiera la luz de las infinitas velas que le proporcionan pueden mantenerla a salvo de un monstruo que se esconde tras unas palabras bonitas y una sonrisa pícara. Ahora, Célie tiene un nuevo motivo para temer a la oscuridad, porque algo (alguien) viene a por ella. Y cuanto más se acerca, más tentada se siente de ceder a los oscuros deseos de esa persona… y a los suyos propios.
Me llamo Billie, tengo veinte años y soy la hija del embajador de Estados Unidos en Francia.
Siempre me he sentido atrapada en mi propia vida, y la situación empeoró tras la muerte de mi madre, ya que mi padre se volvió obsesivo con mi seguridad y me asignó dos guardaespaldas en lugar de uno: Aaron y Caleb.
Nuestra estancia en París está a punto de terminar y pronto regresaremos a Nueva York. Aaron y Caleb han aceptado viajar con nosotros, y la verdad es que me alivia mucho porque, a pesar de que no soporto tener a alguien siguiéndome todo el día, me he encariñado de Caleb.
Aunque he de reconocer que desde que he conocido a Thomas, un apuesto estudiante de Princeton que está de vacaciones en París, Caleb se está comportando de un modo muy extraño y excesivamente sobreprotector.
Pero no quiero que se le plantee la duda de si ir a Nueva York será la mejor opción para él. Caleb es parte de las pocas cosas buenas de mi vida. Su amistad es más importante que cualquier estúpido sentimiento de celos. No puedo dejar que eso ponga en peligro nuestro vínculo especial.
Menos mal que, afortunadamente, sé cómo manejar la situación.
Cuando se publicó El retrato de Dorian Gray, la crítica moralizante acusó a su protagonista de ser una figura satánica, corrompida y corruptora, sin comprender que era el héroe de una novela que reflejaba la fatalidad de los románticos: Oscar Wilde (1854-1900) había querido hacer de la belleza un refinamiento de la inteligencia; y para ello sumió a su protagonista en una atmósfera de perversión dominada por el arte y los poderes de un misterio que está más allá de la realidad. Pero el autor no se conforma con la simple descripción: incrusta a su personaje en un crimen y, como Edgar Allan Poe en sus relatos, lo rodea de un misterio que la razón no puede explicar. Dorian Gray sigue siendo, más de cien años después de la muerte de su autor, una piedra angular en los debates entre la ética y la estética, en las relaciones que mantienen el bien y el mal, el alma y el cuerpo, el arte y la vida.
En Seúl, una mujer asiste a clases de griego antiguo. Su profesor le pide que lea en voz alta pero ella permanece en silencio; ha perdido la capacidad del lenguaje, así como a su madre y la custodia de un hijo de ocho años. Su única esperanza de recuperar el habla es mediante el aprendizaje de una lengua muerta.
El profesor, que acaba de regresar a Corea después de pasar media vida en Alemania, se encuentra dividido entre dos culturas y dos lenguas.También él afronta pérdidas: su vista empeora irreversiblemente a cada día que pasa, y convive con el miedo de saber que, cuando llegue la ceguera total, perderá toda autonomía.
Con una belleza inusitada, las voces íntimas de estos dos protagonistas se intercalan y se cruzan en un momento de desesperación. ¿Será posible que encuentren en el otro el modo de salvarse, que la oscuridad dé paso a la luz y el silencio a la palabra?
Edgar Allan Poe liberó las terribles imágenes que atesora el subconsciente para dejarlas deambular entre sus páginas. Abanderado de la novela gótica y precursor del relato detectivesco y de la ciencia ficción, pergeñó historias que llevan el suspenso y el desasosiego hasta una perfección nunca alcanzada y quizá nunca alcanzable de nuevo. Cuentos extraordinarios reúne los más celebrados de esos textos, incluidas piezas que han hecho historia como "El gato negro", "La carta robada", "El hundimiento de la Casa de Usher" o "Los asesinatos de la rue Morgue".
Tori lleva un tiempo saliendo con Valentine y, aunque las cosas van bien, hay una parte de sí misma que cree que tal vez no esté enamorada. Aunque debería hacerlo, no sabe por qué no se siente cómoda para contarle a su mejor amigo qué es lo que le ocurre.
Sinclair siempre ha considerado a Tori su mejor amiga. Este año ambos están en la obra de teatro. A Sinclair lo han escogido para el papel protagonista de Romeo y no le quita los ojos de encima a Eleanor, quien interpreta a Julieta. Sin embargo esto a Tori, que está en el equipo de guionistas, no debería importarle, ¿no?