¡Es hora de superhéroes! Acompaña al señor Lobo mientras vuela al rescate y ayuda a todos sus amigos de la ciudad. A los niños les encantará leer sobre las increíbles aventuras del señor Lobo en este superdivertido libro ilustrado, perfecto para la hora de dormir.
Un cuento infantil entretenido y al mismo tiempo conmovedor.
Angely, Laura y Dany, nos revelan que la adversidad no les impide soñar y transportarse a mundos fantásticos siempre y cuando enciendas la magia de tu imaginación.
Al relatar los sueños de los protagonistas, se describen las fabulosas aventuras de estos pequeños guerreros y al mismo tiempo, su autora nos acerca a conocer parte del drama del cáncer infantil en un hospital público, experiencia que vivió como voluntaria hace unos años.
¿Se pueden guardar palabras en los bolsillos?
¿Puede un paraguas convertirse en pájaro y echar a volar?
¿Se pueden ver las estrellas a través de un embudo?
¿Se puede tocar la Luna con las manos?
Todas estas preguntas se hace Lobezno, cansado de ser un lobo de zoológico. ¡Quiere ser un lobo de cuento! Un día, entre aullido y aullido, escapa de su jaula y se lanza al mundo para cumplir su sueño. Pero las cosas no son como esperaba. ¿Quién le iba a decir a Lobezno que los lobos, en los cuentos, son los más malos de todos?
Si alguna vez te has preguntado de dónde proviene la snitch dorada, cómo adquieren vida las bludgers o por qué los Wigtown Wanderers llevan un cuchillo de carnicero dibujado en el uniforme, entonces querrás leer Quidditch a través de los tiempos.
El Príncipe Único no se lo puede creer: sus papás, su doncella, su cocodrilo, su trono... ¡acaban de desaparecer!
El Príncipe Único no se lo puede creer: sus papás, su doncella, su cocodrilo, su trono... ¡acaban de desaparecer!
La pequeña liebre color de avellana reanudó su paseo y, muy pronto, llegó al pie de la montaña nublada. Vaya sorpresa la esperaba allí, entre los brezos!
Todo el mundo sabía que Magnus era el mejor bailarín del bosque, hasta que llegó alguien nuevo. Una historia conmovedora para aprender que no necesitas ser el mejor, sino disfrutar al máximo de las cosas que te gustan.