Una hija y un padre; dos vidas, una desaparición y un accidente. Una novela deslumbrante sobre la huida, la pérdida y la familia.
«Va a chocar, va a perder el control del automóvil y va a embestir las vallas que separan la carretera del bosque y de los secretos que éste oculta, pero Olivia aún no lo sabe; no tiene idea de lo que va a sucederle en un momento, cuando un recuerdo de una intensidad desusada la asalte, rompa sobre ella como una ola y la arrastre consigo.»
¿Quiénes somos realmente? ¿Qué nos convierte en las personas que creemos ser y qué sucede cuando lo que pensábamos que éramos deja paso a otra cosa? ¿Cuál es la naturaleza secreta de las cosas de este mundo? Olivia se dirige a Mánchester. Y lo que recordará es algo que olvidó que sabía sobre su padre, quien desapareció cuando ella tenía catorce años. Olivia es actriz. Edward Byrne era artista visual; cuando se marchó, dejó cientos de preguntas sin respuesta, pero ninguna evidencia, ninguna certeza, ningún cadáver...
¿Por qué sentimos a veces un deseo irreprimible de huir y dejar todo atrás? ¿Qué sucede cuando nuestra aspiración a ser verdaderamente libres se enfrenta a nuestra incontenible necesidad de consuelo? Patricio Pron, uno de los escritores fundamentales de la narrativa actual en lengua española, se estrena en Anagrama con una novela sobre la familia, la huida, la pérdida y sus paradójicas ventajas; sobre la impostura, la vocación, el miedo al futuro y la posibilidad de que el sentido profundo de las cosas de este mundo se encuentre en las historias que nos contamos. Una magnética y singular narración detectivesca sobre esos misterios que son parte de nuestra naturaleza más secreta.
El teatro reunido de una de las escritoras más sagaces y punzantes de la literatura contemporánea.
Este volumen reúne el teatro de Yasmina Reza, tanto las principales obras traducidas y estrenadas en español como una pieza inédita hasta ahora en nuestro idioma. En todas ellas deslumbra la capacidad de la autora para escrutar los comportamientos humanos, detectar las flaquezas, hurgar en las contradicciones…
Tres amigos reunidos en torno a un cuadro que puede ser, según se mire, una obra maestra o una tomadura de pelo; dos matrimonios que se citan para resolver civilizadamente un incidente protagonizado por sus hijos, pero acaban perdiendo los papeles; cinco actores que ensayan una obra y confiesan sus dudas, una pareja que discute en el aparcamiento de un restaurante… Situaciones que pueden resultarnos familiares se van torciendo hasta mostrar en carne viva todo aquello que preferiríamos que continuara oculto.
Con la fuerza de los diálogos y un humor inclemente, la autora nos obliga a mirarnos en el espejo para reconocer que la vida puede ser tan placentera como cruel. Pocos dramaturgos contemporáneos han sabido retratar el alma humana con la contundencia y lucidez de Yasmina Reza.
Ocho potentes relatos sobre personajes confrontados con lo desconocido y con sus propios miedos.
En uno de los cuentos reunidos en este volumen, la protagonista explica su encuentro con un albatros, ese pájaro solitario y de vuelo majestuoso al que Baudelaire dedicó un poema. Ella y su padre se topan con lo que llaman «albatros perdidos» o «albatros divagantes», aves que, debido al sobreesfuerzo por la falta de viento, enloquecen, se desorientan y acaban llegando a lugares muy alejados de su hábitat natural. Los protagonistas de estos ocho relatos son cada uno a su manera «divagantes». Algún acontecimiento inesperado ha quebrado las rutinas de sus vidas, los ha obligado a salir de su espacio habitual y a moverse por extraños territorios. Por ejemplo, la chica que un día conoce en un hospital a un tío proscrito durante años en su familia por algo que nadie quiere decir; el actor frustrado que inicia, sin darse cuenta, una vida distinta en la casa de un antiguo compañero de carrera a quien le han ido mejor las cosas; la mujer que vive con sus hijos en un mundo agonizante en donde conviene más estar dormido que despierto, o el narrador del magnífico cuento «La puerta rosada», quien descubre la solución para su insatisfactoria vida familiar en una callecita solitaria. Estos relatos, que transitan entre el realismo y la fantasía, enfrentan a sus personajes con esa obsesión que nuestra sociedad ha cincelado con esmero: la del éxito y el fracaso, y dan cuenta de la maestría que Guadalupe Nettel ha alcanzado en este género.
La productora de televisión Laurie Moran y su prometido, Alex Buckley, antiguo presentador de su programa de televisión de investigación, están a pocos días de su boda a mediados de verano cuando las cosas toman un oscuro giro. Johnny, el sobrino de siete años de Alex, desaparece en la playa, lo que desencadena un dispositivo de búsqueda.
Los testigos recuerdan a Johnny jugando en el agua y recogiendo conchas detrás de la cabaña de la playa, pero nadie recuerda haberlo visto por la tarde. Al ponerse el sol, la tabla de skimboard de Johnny llega a la orilla y todos se dan cuenta de que podría estar en cualquier parte, incluso bajo el agua.
En este libro, Gornick aborda uno de sus asuntos favoritos, el amor romántico simbolizado por el matrimonio, y lo analiza como uno de los temas clave en la literatura del siglo xx. En un recorrido por la vida y la obra de algunos de los autores que más admira como Willa Cather, Virginia Woolf, Grace Paley, Richard Ford, Raymond Carver o Jane Smiley, la autora defiende que nuestro mundo ha cambiado y que el amor y el matrimonio han dejado de ser, en nuestra época, metáforas que representen adecuadamente la felicidad y la realización personal.Con la misma inteligencia, honestidad y agudeza que caracterizan su célebre libro Apegos feroces, e hilvanando una profunda reflexión que se hunde con elegancia tanto en el conocimiento como en lo vivencial, Vivian Gornick nos brinda un libro extraordinario que cuestiona el supuesto poder transformador del amor y nos revela que este, «como la comida o el aire, es necesario pero insuficiente: no puede hacer por nosotros lo que debemos hacer por nosotros mismos».
Con cuatro años, Marta Rota perdió a su padre, y en cierto modo también a su madre, pues Margarita Jovani tuvo que ganarse la vida para mantener a su familia.
Procedente de una familia de sastres barceloneses, Margarita se había criado entre telas, hilos y patrones, y se le daba muy bien percibir la belleza que puede sacar a la luz o realzar la alta costura, un don heredado y potenciado por Marta.
Esta niña, con una intuición fuera de lo común para combinar colores y prendas, abandonó a edad temprana unos estudios que poco le ofrecían, porque ella solo tenía un deseo: vestir a las mujeres.