La tarde del 12 de agosto de 1979, los hermanos Nicolás y Hugo y la pequeña Blanca desaparecen en una localidad del Baixo Miño. La niña es encontrada a la mañana siguiente dentro de una cesta de mimbre en la orilla opuesta del río sin recordar nada de lo ocurrido. Pese a la intensa búsqueda, los cuerpos de los dos niños nunca aparecen.
Veinticinco años después el hallazgo de unos restos óseos en un yacimiento arqueológico apunta a que se trata de los dos hermanos desaparecidos. A partir de entonces, Blanca y el periodista Lois Lobo inician una compleja búsqueda para descubrir qué sucedió a través de los caminos engañosos de la memoria y de los tabúes de una sociedad hermética acostumbrada a que los trapos sucios se laven en casa.
Antonio José Bolívar Proaño vive en El Idilio, un pueblo remoto en la región amazónica de los indios shuar; con ellos aprendió a conocer la selva y a respetar a los animales y a los indígenas que la pueblan, pero también a cazar el temible tigrillo. Un día decidió leer las novelas de amor que dos veces al año le lleva el dentista Rubicundo Loachamín. Con ellas se aleja de la estupidez de esos forasteros que creen dominar la selva porque van armados pero que no saben cómo enfrentarse a una fiera enloquecida: de eso se ocupará el viejo Bolívar Proaño.
Sevilla, ola de calor. Todo el que puede huye a la playa. No así Camino Vargas, jefa accidental del Grupo de Homicidios desde el tiroteo que dejó en coma al inspector Arenas. Alguien ha atropellado salvajemente a una mujer y se ha dado a la fuga. Este asesinato se va a transformar en el foco de atención mediática cuando se filtra un dato aún más perturbador: el homicida introdujo un chupete en la boca de la víctima antes de desaparecer de la escena del crimen. Todos los indicios apuntan a la expareja, un maltratador psicológico, y las estadísticas no están de su lado. Sin embargo, cuando la autopsia desvela que la víctima estaba embarazada y los asesinatos comienzan a sucederse, Camino comprenderá que se halla ante el caso más duro de su carrera.
Carolina del Sur, 1964. Lily Owens es una joven de catorce años cuya vida ha girado alrededor de un padre que no la cuida y que la responsabiliza de la misteriosa muerte de su madre. Cuando su niñera Rosaleen, una mujer negra, orgullosa y sin miedo, es encarcelada por defender su recién adquirido derecho al voto frente a los racistas, Lily decide que ambas deben ser libres. Escapan a Tiburón, Carolina del Sur, un pueblo que guarda el secreto del pasado de su madre, y en el que serán alojadas por un excéntrico trío de hermanas apicultoras, que introducirán a Lily en el fascinante mundo de las abejas y la miel.
Cuando su marido huye con su amante para abrir una granja de cocodrilos en Kenia, la vida de Joséphine Cortès se derrumba. Mientras tanto, su hermana Iris, que parece tenerlo todo, sueña con devolverle el sentido a su vida. Y cuando durante una cena Iris se encuentra con un editor famoso, parece que ha encontrado su oportunidad.
Tras mucha persuasión, logra convencerlo para que le publique una novela... pero hay un problema: Iris no tiene nada escrito. Así que le ofrece a su hermana un trato: Joséphine escribirá la novela y se embolsará las ganancias, pero el libro se publicará bajo el nombre de Iris. Y todo va bien... hasta que la novela se convierte en el mayor best seller de la temporada.
Elfriede Jelinek, continuadora de la tradición sarcástica austríaca, la de HOrvath, Karl Kraus y Thomas Bernhard, denuncia en Los excluidos -título que se relaciona con Los secuestrados de Altona, de Sartre- la dificultad de la vida sin complejos de la Austria posbélica, deseosa de ignorar los crímenes del nazismo. Dicha premisa se plasma en la ficción a través de la historia de tres estudiantes de bachillerato y un ambicioso muchacho de clase obrera que asaltan a los transeúntes para robarles. A la determinación de una sociedad decidida a olvidar el pasado y en la que el triunfo social se convierte en el valor supremo, los cuatro adolescentes responden con el disgusto y el odio.
Si alguien le pidiera a Jasmine Santos que describiera la última época de su vida con una sola palabra, seguramente utilizaría una que habría que censurar.
Después de años de dedicación e incontables huesos y compromisos rotos, sabe que su oportunidad para dedicarse profesionalmente al patinaje artístico está esfumándose. Sin embargo, cuando la oferta que tanto estaba esperando por fin llega, lo hace de la mano de un idiota arrogante que es, además, su némesis.
Pero tal vez haya llegado el momento de que Jasmine reconsidere muchas cosas...
Entre ellas, a Ivan Lukov.
Florence Day escribe por encargo para una de las autoras de romántica más prolíficas de la industria, pero tiene un problema: tras una ruptura terrible, ha dejado de creer en el amor. Para ella, está muerto y enterrado. Y de esto Florence sabe mucho, porque tiene un don que le permite ver fantasmas desde niña.
Cuando su nuevo editor no acepta darle una prórroga para su última entrega, Florence se prepara para decirle adiós a su carrera, pero justo entonces recibe una llamada sobre otra despedida que la obliga a volver a casa. Y, aunque Florence espera encontrarse su pueblo natal casi como lo dejó, se lleva una sorpresa cuando un fantasma inesperado la sorprende en la puerta de la funeraria familiar.
Para ella, el romanticismo ha pasado a mejor vida... pero lo mismo le ha sucedido a Benji, su editor, y su asunto sin resolver hará que Florence se cuestione todo lo que siempre ha creído saber sobre las historias de amor.
Ha pasado un año desde que el ex detective de la policía de Nueva York consiguió atrapar al asesino de los números y, aunque es su intención retirarse definitivamente junto a su esposa Madeleine, un nuevo caso se le presenta de forma imprevista.
Una novia es asesinada de manera brutal durante el banquete de bodas, con cientos de invitados en el jardín y ese es un reto al que es imposible resistirse. Todas las pistas apuntan a un misterioso y perturbado jardinero pero nada encaja: ni el móvil, ni la situación del arma homicida y sobre todo, el cruel modus operandi.
Dejando de lado lo obvio, Gurney empieza a unir los puntos que le descubrirán una compleja red de negocios siniestros y tramas ocultas llevadas por un sádico...