Inspirado por la metodología de la «atención total» de Krishnamurti -a quien la realidad dejaba en éxtasis cada tarde-, César Aira exhorta a la superación de la ceguera del urbanita que sin tiempo para nada es incapaz de demorarse para observar la maravilla del mundo.
Autor fundamental, en estas once ponencias y charlas desvela los delicados mecanismos del artificio literario, incita a imaginar una Buenos Aires vaciada de todo excepto de sus árboles o a repasar una poética del trazo entre las notas de Duchamp para El gran vidrio, el proyecto calígrafo-maníaco de Levrero o la letra ínfima que para Benjamin implicaba un pensamiento refinado…
La inteligencia desfachatada y excepcional de Aira vuelve estos ensayos puro goce y puro juego. Un sacudón a cualquier hábito que amenace con adormecer la sensibilidad o impida la sorpresa.
En las fronteras del Imperio se extiende una provincia desnuda y mineral donde el frío, la escarcha y el ritmo lento de los largos inviernos parecen adormecer a los habitantes de un pequeño pueblo.
Una mañana, el párroco es descubierto con la cabeza aplastada por una piedra. ¿Cuál fue la naturaleza del crimen? ¿Quién podía tenerle tanto rencor en una ciudad donde, hasta entonces, las comunidades religiosas habían vivido en armonía?
La investigación es confiada a Nurio, el policía que demasiado a menudo se deja llevar por sus pasiones y que desprecia a Baraj, su adjunto, un gigante distinguido con alma de poeta. Pero ¿tiene interés el Imperio en que se descubra al verdadero asesino? Cuando se abusa de los pueblos y los Estados, ¿cómo se escribe o se reescribe la Historia? ¿Y qué pueden hacer los seres humanos ante su impetuoso curso?
Primero de poeta son todos los papeles que rellené y quemé, todos los pasos que no di, las vidas que perdí. Todas las declaraciones de amor que callé, los sueños que rompí, los miedos de los que aprendí. Es mi impaciencia, mis ganas de sentir y el pánico. Es descubrir que mis miedos siempre ganan la partida. Es empujarte a irte por si te acercas demasiado. Es querer que te acerques demasiado. Primero de poeta son todos mis errores. Y mi cura.
Después de una década, decenas de miles de personas han cursado ya Primero de poeta con Patricia Benito y nadie ha salido indemne de sus lecciones, como siempre sucede con la buena poesía. Esta edición especial conmemorativa revisada por la autora recrea la historia de su escritura, su creación y su publicación a través de notas inéditas que explican el trasfondo de algunos de sus textos más icónicos.