Aunque conocida con este título abreviado, el verdadero título de esta obra, mucho más largo, resume perfectamente la historia: Relato de un náufrago que estuvo diez días a la deriva en una balsa sin comer ni beber, que fue proclamado héroe de la patria, besado por las reinas de la belleza y hecho rico por la publicidad, y luego aborrecido por el gobierno y olvidado para siempre. Publicado por entregas en El Espectador de Bogotá en 1955 y más tarde en libro (en 1970), no una novela, sino un reportaje periodístico que da cuenta de un suceso real. Con impecable técnica literaria y profesional estilo noticioso, García Márquez relata un suceso acaecido a un marinero de la armada colombiana llamado Luis Alejandro Velasco. La historia, reconstruida minuciosamente por el escritor sudamericano en primera persona a partir del testimonio del protagonista, fue tácticamente atribuida a éste en la prensa y sólo legitimada tras el formidable éxito de Cien años de soledad.
Un libro que pretende reivindicar un legado cultural de gran peso en las vidas de todos nosotros.
Desde la publicación, hace casi treinta años, de la obra de Bruno Bettelheim
Psicoanálisis de los cuentos de hadas no había aparecido ningún libro que nos enseñara tanto sobre los cuentos infantiles como el que el lector tiene en sus manos. En Los cuentos de hadas clásicos anotados se recuperan las historias más queridas por los niños de hoy y de siempre a través de la selección de Maria Tatar, una de las mayores expertas mundiales en el campo de literatura popular e infantil.
En este volumen, bellamente ilustrado, Tatar ha seleccionado veintiséis cuentos clásicos que son otros tantos modelos que ayudan a los niños a desenvolverse en el mundo real y contribuyen a desarrollar el ingenio y el coraje necesarios para sobrevivir en un mundo gobernado por adultos. Este libro pretende reivindicar un legado cultural de gran peso en las vidas de todos nosotros, guiando a los lectores a través de cada una de las historias, explorando sus orígenes históricos, sus complejidades culturales y sus efectos psicológicos.
La segunda novela del maestro colombiano es una historia de injusticia y violencia: un viejo coronel retirado va al puerto todos los viernes a esperar la llegada de la carta oficial que responda a la justa reclamación de sus derechos por los servicios prestados a la patria. Pero la patria permanece muda... En El coronel no tiene quien le escriba, el autor se alejó del barroquismo faulkneriano de La hojarasca, su obra anterior, y optó por la economía expresiva de un estilo directo y transparente, sin perder la profundidad temática y emotiva que siempre lo caracteriza.
Evelyn St. James no es el tipo de mujer que un hombre olvida fácilmente. Beckett Porter, desde luego, no ha sido capaz de hacerlo. Cuando Evie reaparece de repente en su vida, Beckett se da cuenta de que no tenía ni idea de que la increíble mujer que conoció es, en realidad, una influencer mundialmente famosa. Pero al terminar su trabajo en el pueblo, Evelyn se marcha y Beckett se propone, esta vez sí, olvidarla.
Sin embargo, Evie está harta de su vida online y no tarda en regresar a Inglewild y a la encantadora Lovelight Farms. Y no: su decisión no tiene absolutamente nada que ver con cierto granjero guapo con el que pasó dos noches increíbles. Nada en absoluto.
Reseñas:
«Borison tiene una magia especial con las palabras».
Elena Armas, autora de Farsa de amor a la española
«La serie Lovelight es mi lugar feliz».
Sarah Adams, autora de Las reglas del juego
«Un delicioso capricho para los últimos días del verano».
Chloe Liese, autora de Tú antes que yo
Nunca me mintió. No rompió ninguna promesa, porque nunca me hizo ninguna.
Cuando Tate Collins conoce al piloto Miles Archer, no cree que sea amor a primera vista. Ni siquiera irían tan lejos como para considerarse amigos. Lo único que Tate y Miles tienen en común es una innegable atracción mutua. Una vez que sus deseos salen a la luz, se dan cuenta de que tienen el acuerdo perfecto. Él no quiere amor, ella no tiene tiempo para el amor, así que solo queda el sexo. Su arreglo podría ser sorprendentemente perfecto, siempre que Tate pueda cumplir con las únicas dos reglas que Miles tiene para ella.
Vera, Sara y Alexander eran inseparables. Siendo adolescentes, habían establecido un vínculo especial, una amistad inquebrantable; habían trenzado sus vidas con nudos en apariencia irrompibles. ¿Por qué entonces, en la actualidad, Sara se siente sola? ¿Por qué los veranos en el lago ya no son tan mágicos como en algún momento fueron?