Embárcate en un viaje inolvidable con “Corre, linda”, una obra cautivadora que te atrapa desde las primeras líneas. Cada página vibra con distintas emociones: desde el dolor hasta la liberación, revelando la profunda necesidad de encontrar y compartir el amor en un mundo violento.
Marisol Rivas, la menor de catorce hermanos, comparte su impactante historia de resistencia y redención. Desde sus primeros años bajo el control estricto de su padre hasta su renacimiento después de un matrimonio abusivo, experimentará pérdidas desgarradoras y descubrimientos transformadores.
A través de estas páginas, Marisol no solo comparte su vida, sino también lecciones valiosas sobre perdón, fuerza y esperanza. “Corre, linda” no es solo su testimonio, es también un espejo en el que todos podemos reconocernos y sobre todo, una narrativa que ilumina a aquellos que sufren y buscan inspiración. Esta crónica, llena de lucha y triunfo, es una enseñanza conmovedora de la capacidad humana para superar la crueldad y buscar la luz, incluso en los momentos más oscuros.
Tienes en las manos una historia olvidada. No se trata de una historia amplia, definitiva y exhaustiva del mundo, sino algo más sosegado, más íntimo y particular: un viaje único, a través de un centenar de objetos que nos transportan a múltiples, fascinantes y a menudo ignoradas hazañas femeninas.
Con una prosa delicada y magnética, cosida a través de un sinfín de anécdotas trepidantes, Annabelle Hirsch despliega a una gran selección de mujeres (y sus pertenencias) que, en el fondo, es una inmejorable excusa para desvelar los pensamientos y sentimientos cotidianos de todo un género. El resultado es una historia alternativa, íntima y conmovedora, de la humanidad.Una estatua de Hatshepsut, un consolador de cristal del siglo xvi, una máquina de escribir Remington, un bolígrafo que perteneció a Greta Garbo, un Tupperware o un broche de Hannah Arendt explican la evolución del rol (y el poder) femenino desde las sociedades prehistóricas hasta hoy. Cosas de mujeres desmonta todo lo que que creemos saber de nuestro pasado para demostrar que, en sus facetas más desconocidas y domésticas, este ha sido tan complejo y fascinante como las mujeres que lo poblaron.