NOVEDADES

Ver como
Ordenar por
Mostrar por página
Imagen de HUBO UN MOMENTO EN QUE PUDIMOS CAMBIAR
995 796

HUBO UN MOMENTO EN QUE PUDIMOS CAMBIAR

El fenómeno del Calentamiento Global ha desatado en cascada una serie de medidas gubernamentales nacionales e internacionales, políticas, económicas y sociales que afectan y van a afectar a la vida cotidiana de la ciudadanía. Además se ha producido un fenómeno de sobreinformación en los medios amplificado por unos estilos de comunicación sensacionalistas e incoherentes. Por ese motivo, la ciudadanía se sigue manteniendo en la indiferencia, el conformismo, el negacionismo o el fatalismo hacia este tema de importancia global y fundamental para el futuro de la humanidad. Algunos científicos expertos han cruzado la línea de su trabajo en la sombra y han sentido la necesidad de comprometerse y alzar la voz para luchar contra el negacionismo del Calentamiento Global..., sin demasiado éxito.
995 796
Imagen de UNA IDEA DE FELICIDAD
995 796

UNA IDEA DE FELICIDAD

Los momentos fulgurantes pueden anidar en cualquier parte, a cualquier hora y bajo cualquier circunstancia. Cuando se manifiestan, la alegría y el placer emergen de manera imprevista, y la realidad, por muy oscura que sea, resplandece durante un instante. La música, en sus polifacéticas formas, también es capaz de desencadenar episodios memorables y actuar como catalizador de sentimientos profundos. Puede elevar nuestro estado de ánimo, proporcionarnos una vía para expresar y procesar las emociones, hacer que fortalezcamos nuestras relaciones de pertenencia con el mundo que nos rodea y, entre otras muchas cosas, ofrecer experiencias que nos permitan establecer una conexión genuina con nuestro propio ser. Wanda Landowska vive uno de esos momentos fulgurantes interpretando a Scarlatti al clave, en medio de un estruendo de cañonazos antiaéreos. Erik Satie protagoniza otro trabajando en la composición de su nueva obra en un café cerca del cementerio de Montparnasse, mientras alterna cantidades industriales de cerveza con tragos de aguardiente. Albert Einstein, en su casa, cada una de las veces que come lentejas con salchichas o interpreta al violín música de su adorado Mozart. Marian Anderson, poniendo el cuerpo y la voz en cada una de sus actuaciones para transformar lo que Martin Luther King Jr. llama el último bastión del elitismo: la música clásica. Winnareta de Polignac, charlando sobre los Cuartetos de cuerda de Beethoven con Virginia Woolf en el salón que la escritora tiene en Londres, en el distrito de Bloomsbury. Imogen Holst, al darse cuenta de que, a través de la música, los habitantes de un pequeño pueblo del suroeste de Inglaterra dan rienda suelta a la necesidad innata de conectarse y expresarse emocionalmente con los demás. Glenn Gould, haciendo todo lo contrario, aislándose del mundo con su piano y su silla enclenque en una sala repleta de micrófonos. Y es que el pianista aseguraba: «mi idea de felicidad es pasar doscientos cincuenta días al año en un estudio de grabación».
995 796
Imagen de LOS NO LLAMADOS POR SU NOMBRE
995 796

LOS NO LLAMADOS POR SU NOMBRE

Meister Mathis, Mathis Grün de Eisenach, Mathis Godhart (o Gothardt) Nithart (o Nithardt), Matthias Grünewald, el pintor (y también, quizá, el ingeniero, el fabricante de jabones, el conocedor de alquimias) son algunas de las señales que han velado y velan todavía al hombre que pintó el imponente Retablo de Isenheim a principios del siglo, en una Europa diezmada por la pobreza, la guerra y la peste, en la que tronaban las revueltas de campesinos, el comercio de bulas era moneda corriente y la Reforma echaba a andar. El políptico, con sus escenas sucesivas, estaba destinado a causar el estremecimiento de los enfermos que acudían en río al hospital que los antonianos habían abierto en Isenheim: detenerse ante el cuerpo retorcido y masacrado de la Crucifixión, la música angélica de la Natividad, un san Antonio tentado y vejado, o el triunfo de la Resurrección debía propiciar la curación a sus males las fiebres y la lepra, el fuego de san Antonio, la sífilis, la epilepsia .
995 796
Imagen de ELOGIO DE SOCRATES
995 796

ELOGIO DE SOCRATES

Hadot nos muestra que Sócrates, partero de espíritus, permite responder a la pregunta de qué es filosofar, ayuda a su interlocutor a replegarse en sí mismo, a cuestionarse, es decir, a descubrir la conciencia. Sócrates no engendra nada, porque no sabe nada, pero propicia que otro pueda engendrarse a sí mismo. Invierte la relación entre maestro y discípulo mediante un procedimiento existencial que tanto Kierkegaard como Nietzsche han tratado de repetir. Para Kierkegaard, nos cuenta Hadot, el mérito de Sócrates consiste en haber sido un pensador sumido en la existencia, y no un filósofo especulativo que olvida lo que es existir. Es decir, Sócrates nos desvela la filosofía como forma de vida.
995 796
Imagen de PRESIDENTA
995 796

PRESIDENTA

Por primera vez en 200 años México eligió a una mujer como presidenta. El reconocido periodista y escritor, Jorge Zepeda Patterson, construye la narración más completa y documentada sobre la vida personal y política de Claudia Sheinbaum: el activismo de sus padres en el 68, su temprano compromiso social, su educación humanista y la pasión por la ciencia que la llevó de la unam a Berkeley; y de diseñar estufas de leña en la zona purépecha a desarrollar un sistema de vacunación idóneo en tiempo récord. La crónica relata desde los días en su infancia cuando visitaba con su madre a presos políticos en Lecumberri hasta el día en que los mexicanos la convirtieron en la primera presidenta del país.
995 796
Imagen de CONOCER LA BIBLIA
995 796

CONOCER LA BIBLIA

La Biblia tiene una riqueza inagotable, y no solo como obra literaria. Es el “libro de cabecera” de los cristianos, porque es la Palabra de Dios, dirigida a los hombres de todo lugar y de todo tiempo. Conocerla es conocer a Dios. Conocerla mejor es conocer mejor a Dios. Vivir sus enseñanzas es acercarnos al Cielo aquí en la tierra. Para presentarla en este libro, el autor acude a cinco palabras clave: revelación, historia, literatura, salvación e Iglesia.
995 796