Aquí, en Donde empieza el hombre de Marino Berigúete (República Dominicana, 1962), empieza también el cuerpo que explora líricamente el mundo, palpando las oquedades del sueño, las formas de la ausencia, los latidos de la luz; aquí empieza también, con una voz detenida y meditada, el cuerpo que mira el pensamiento, su persistencia, su vacuidad, sus revelaciones; aquí empieza un cuerpo que, distendido en el tiempo y el espacio, recurre a un singular imaginario para hacer al mismo tiempo presente y problemática su existencia; aquí una voz que no se cansa nunca de hacer eco de su ser, de su desdoblarse, de su estar en ninguna parte nunca y siempre con uno mismo; aquí, en Donde empieza el hombre podemos ser testigos de la duda, la sombra y la confirmación juntas y vueltas poema.
Gustavo Osorio de Ita
Busca en cada escena a Donald, a Daisy, a Rico McPato y a los pequeños Hugo, Paco y Luis. ¡Y aquí no termina la diversión! Ve al final del libro y descubre más personajes y objetos ocultos.
Este libro es un faro en el vasto océano de las finanzas personales, Una guía que, como prologuista, me complace presentar a los que se aventuren en sus páginas. A través de la experiencia y la sabiduría del autor, encontrarás una brújula confiable para navegar por las aguas financiera desde el inicio de tu viaje hasta las rutas desafiantes.
Surfea con el travieso Stitch por diferentes paisajes en busca de las mejores olas. ¿Puedes encontrarlo en cada lugar que visita antes de que se meta en un mar… de problemas?
¡Únete a esta emocionante aventura de Disney! ¡Nuestros héroes de Disney y Pixar se escondieron! Explora océanos, ciudades, castillos y otros increíbles paisajes para ir en busca de Moana, Simba, Woody y muchos personajes más. Encontrarlos no será fácil, pero no te rindas.
A los diecinueve años, a Chris Offutt ya se le habían cerrado las puertas del Ejército, del Cuerpo de Paz, de la Guardia Forestal y de la Policía, así que abandonó su hogar en los Apalaches y se dirigió hacia el norte para dar comienzo a una serie de viajes que después lo llevarían de costa a costa por Estados Unidos, un país habitado por una variedad impredecible de vagabundos y bichos raros, en busca de trabajos temporales, mientras dormía en habitaciones de mala muerte y soñaba con ser artista. Quince años después, Chris se ha establecido junto con Rita, su mujer, a orillas del río Iowa, donde descansa y escribe, a la espera del nacimiento de su primer hijo. Será entonces cuando pueda iniciar un camino bien distinto al emprendido años atrás, ese que habrá de llevarlo a la madurez.