La realidad es un invento relativamente reciente. Desde tiempos inmemoriales han sido las mitologías que cada cultura ha construido ―las ficciones que nos hemos ido contando― las encargadas de dar forma a eso que llamamos «realidad». Hoy es el propio relato científico el que nos está obligando a replantearnos su existencia. Y si descorremos ese velo, ¿qué es lo que hay detrás?
Historia, filosofía, música y matemáticas ―así como la impronta de las narraciones y el poder creador de la palabra― se entrelazan magistralmente en este ensayo para desvelar la trama que construye nuestra idea del mundo, para acercarnos a la singularidad de la vida y la conciencia, para explicarnos el nacimiento de la ciencia, la revolución cuántica, el advenimiento de la inteligencia artificial y las relaciones que se establecen entre todos estos fenómenos y las diversas formas de espiritualidad.
Esta es la primera pregunta que Elio se hace después de que Eva, su hermana, su compañera inseparable y su amiga del alma, caiga desde lo alto de una azotea. En ausencia de Eva, tan inteligente, tan inquisitiva, tan exigente e intolerante a la injusticia, ¿quién es Elio? ¿Quién es Mónica, su madre, a quien la adolescencia había colocado a mil planetas de distancia de su hija? ¿Qué lugar ocupa en este juego de ausencias Mateo, el psiquiatra de Elio, que tiene que ayudarlo a transitar por el duelo de una pérdida que primero debe desentrañar si ha sido accidental o provocada?
Elio no sabe cómo se llama un mellizo cuando el otro muere, pero sí sabe que Eva ya no está, ha volado. Lo que ella siempre ha querido.
Ahora tiene que decidir qué desea hacer él: cómo contar qué le ha sucedido a su hermana, y con su propia vida.
«A veces el amor te pone en el camino equivocado para que sepas cuánto duele».
A las doce de la mañana del 14 de diciembre, una joven llena de magulladuras se presenta desnuda en las instalaciones del FBI de Nueva York con varias notas amarillentas en la mano. El inspector Bowring, jefe de la Unidad de Criminología, intentará descubrir qué oculta la joven y su conexión con otro caso, el de una mujer que aparece decapitada horas más tarde y cuyo nombre coincide con el que estaba escrito en una de las notas. A medida que avance en la investigación se dará cuenta de que este caso abre antiguas heridas difíciles de cicatrizar.
Centro de Boston, 24 de diciembre, un hombre camina desnudo con la cabeza decapitada de una joven. El doctor Jenkins, director del centro psiquiátrico de la ciudad, y Stella Hyden, agente de perfiles del FBI, se adentrarán en una investigación que pondrá en juego sus vidas, su concepción de la cordura y que los llevará hasta unos sucesos fortuitos ocurridos en el misterioso pueblo de Salt Lake diecisiete años atrás.
Con un estilo ágil lleno de referencias literarias -García Márquez, Auster, Orwell o Stephen King- e imágenes impactantes, Javier Castillo construye un thriller romántico narrado a tres tiempos que explora los límites del ser humano y rompe los esquemas del género de suspense.
Fue en un apartamento lúgubre de Vanves, durante su exilio francés, donde Tsvietáie-va escribió el presente texto, que relata el encuentro de la pequeña Marina con el dia-blo en la habitación de su hermana, don¬ de se refugiaba para leer libros prohibidos. Con una prosa burlona, ora exaltada, ora gélida, pero siempre hechizante, la poeta relata el despertar de su fascinación por las palabras, encarnadas en la figura del dia-blo, que su implacable mirada transforma en una criatura tan temible como seduc-tora. Una extraordinaria evocación lírica de la infancia y de la gestación de un genio literario irrepetible.
Este es el relato de una niña judía de trece años que escribió su diario entre el 12 de junio de 1942 y el 1 de agosto de 1944.
En estas páginas, Ana cuenta su vida y la de otras siete personas judías, que, como ella, se vieron obligadas a esconderse en la Casa de atrás: una buhardilla ubicada en la parte trasera de las oficinas de su padre. Desde ese lugar, la niña describe las atrocidades y los horrores de la Segunda Guerra Mundial, así como los más estremecedores sentimientos, las más desgarradoras emociones y la absoluta precariedad en la que tenían que vivir, hasta que fueron descubiertos y llevados a diversos campos de concentración.