Una sencilla y eficaz guía para recuperar el control de tu vida.
¿La ansiedad está controlando tu vida? ¿Determina a dónde vas, que haces o con quien pasas el tiempo? ¿Te mantiene atrapado en una burbuja de miedo y pánico? La ansiedad surge en cualquier momento y lugar; por eso, necesitas habilidades inmediatas y sencillas para seguir adelante cuando la preocupación se apodera de ti. Esta guíafácil te ayudará a dominarla y a dejar de evitar todo aquello que te pone ansioso.
En Enseñale a tu ansiedad quien manda encontrarás unenfoque práctico y directo de tres pasos basado en laterapia cognitivo-conductual (tcc). Esta guía te ayudará a responder de forma eficaz a los pensamientos angustiantes y los desafíos futuros, y a hacer las paces con la incertidumbre. Si, de una vez por todas, te sientes preparado para vivir una vida plena sin que la ansiedad se interponga constantemente, aquí tienes la respuesta para lograrlo.
En 1572, para superar una crisis de melancolía tras la muerte de su padre, Montaigne se retiró al castillo familiar con el fin de dedicarse al ocio, la lectura y la reflexión. Allí, en la torre de la biblioteca en cuyas vigas de madera hizo grabar sentencias latinas y griegas, escribió sobre temas tan diversos como los caballos de guerra y los caníbales, padres e hijos, la conciencia y la cobardía, la poesía y la política, el sexo y la religión, el amor y la amistad, el éxtasis y la experiencia, la tortura y la justicia, el destino y la realidad, los duelos y la brujería, la soledad y la muerte.
Las obras que en vida dieron fama como escritor a David Hume no son las mismas que con posteridad han consolidado su reputación como filósofo. Entre las primeras se cuentan estos Ensayos, cuya preparación y revisión ocupó a Hume durante toda su vida adulta hasta su muerte, a lo largo de sucesivas ediciones, corregidas y ampliadas personalmente por él. Las palabras de su amigo John Holme resumen bien el interés de esta obra: «Sus Ensayos son a la vez populares y filosóficos; en ellos se unen, de una manera rara y feliz, la profundidad científica y el buen estilo literario».
Un fascinante compendio de ensayos a medio camino entre la poesía y el ensayo antropológico.
Desde que se iniciara como escritor, Eliot Weinberger encontró en el ensayo un territorio inexplorado que a partir de entonces no ha dejado de investigar. Ha creado un fascinante compendio de antropología universal reduciendo la distancia entre la poesía y la narrativa hasta lo ínfimo, y así ha renovado profundamente la forma del ensayo contemporáneo. En estos Ensayos elementales el lector encontrará parte de los textos publicados a lo largo de su trayectoria, así como otros inéditos hasta la fecha.
Un conjunto de ensayos de carácter único, cuyas trabadas piezas, que a menudo se entremezclan en la configuración de otras, confluyen en una prodigiosa variedad temática —del viento a los rinocerontes, pasando por los lagartos, los aztecas, Empédocles, los Chang o las abejas— y en un imaginario cultural en el que los límites entre las mitologías orientales y las ficciones occidentales también se difuminan.
Tomando de la poesía la versificación, la metáfora y la imagen; de la prosa enciclopédica, una voz veraz y un respaldo histórico documentado; de la tradición oriental, la proliferación de elementos naturales y cierto sedimento exótico-sagrado (son comunes las matemáticas y la geometría, los pequeños rituales casi tribales), Weinberger centra su atención en las particularidades de lo humano —sus sueños, literaturas y paisajes— y es capaz de darles forma con una escritura ambigua, muy sencilla, que convierte este corpus en un ejercicio de imaginación poética superlativa.
Esta obra estudia la obra de Enrique Dussel, en la cual se integran experiencia, cultura y circunstancias alrededor de un núcleo problemático: sujeto y alteridad. Sobre este eje descansan las coordenadas de nuestra incursión, encaminada hacia una comprensión holística del entramado filosófico de su pensamiento.
Hola, soy el tío que lee tus mensajes y, por cierto, me he enamorado de ti...»
Beth y Jennifer trabajan en el departamento de redacción de un periódico. Son inteligentes, divertidas y muy buenas amigas, y suelen escribirse correos en los que discuten aspectos de sus vidas personales, pero lo que no saben es que un compañero de trabajo también los está leyendo.
Lincoln O'Neill es el tipo que lee los correos. Ese es su trabajo en la empresa. Debería haberlas advertido la primera vez que transgredieron las normas, pero las dos parecen tan majas... Le gustan, le gustan mucho, sobre todo Beth.
¿Podrías enamorarte de alguien a quien no has visto nunca?