¿Sabías que el golf es el primer deporte que se ha jugado fuera del planeta Tierra?
¿Que los deportistas en las antiguas Olimpiadas griegas competían desnudos?
¿Que el partido de fútbol con más expulsados ocurrió en Argentina y el arbitró sacó 36 tarjetas rojas entre todos los jugadores, incluidos los del banquillo?
Las emociones positivas, como la alegría, la ilusión, la esperanza o la felicidad desarrollan capacidades tan importantes como la imaginación, la curiosidad o la creatividad y pueden fomentar valores como la amistad y el compañerismo. Estos cuentos, quieren reforzar la inteligencia emocional de los niños a través de encantadores personajes.
Nikki ha crecido en una pequeña isla de Bali. Alex ha aterrizado en ese oasis huyendo de Londres. Ella es veterinaria y da clases de yoga. Él es piloto de aviones y vive rodeado de lujo.
Solo tienen treinta días para estar juntos, así que ninguno de los dos espera la vorágine de sentimientos y verdades a medias que harán que Alex y Nikki vivan un romance para el que ninguno de los dos está preparado.
¿De qué huye Alex? ¿Cuál es la verdadera razón de los miedos de Nikki? ¿Se puede vivir un amor con fecha de caducidad? ¿O hay historias de amor que no tienen billete de vuelta?
«TREINTA ATARDECERES HAN BASTADO PARA ENAMORARME PERDIDAMENTE DE TI»
Nikki ha crecido en una pequeña isla de Bali. Alex ha aterrizado en ese oasis huyendo de Londres. Ella es veterinaria y da clases de yoga. Él es piloto de aviones y vive rodeado de lujo.
Solo tienen treinta días para estar juntos, así que ninguno de los dos espera la vorágine de sentimientos y verdades a medias que harán que Alex y Nikki vivan un romance para el que ninguno de los dos está preparado.
¿De qué huye Alex? ¿Cuál es la verdadera razón de los miedos de Nikki? ¿Se puede vivir un amor con fecha de caducidad? ¿O hay historias de amor que no tienen billete de vuelta?
"Vivo una relación con Édouard Louis y Didier Eribon que ya dura más de diez años. Desde los primeros meses de esta amistad, algo cambió en nuestras vidas, se produjo una quiebra profunda en nuestras existencias: empezamos a viajar juntos, a cenar los tres casi sistemáticamente, a crear, a pensar y a intervenir juntos en el espacio público, a celebrar juntos nuestros cumpleaños y los momentos tradicionalmente asociados a la familia, como la Navidad, a compartir la integridad de nuestra vivencia. Más allá de la amistad, esta relación se ha convertido para nosotros en un modo de vida, un conjunto de emociones y de experiencias compartidas, con sus ritos, sus lugares, sus tiempos, sus conexiones con los demás, con el mundo cultural e incluso con el mundo en general.