De los grandes clásicos hasta las obras contemporáneas más influyentes, este libro narra con pasión y emoción los 100 libros que marcaron la vida de su autor. Al mismo tiempo, ofrece un recorrido por la historia de la literatura a través de aquellas lecturas imprescindibles que todos deberíamos descubrir al menos una vez.
A través de curiosidades y anécdotas de la vida de los escritores, del contexto sociocultural en el que se publicaron y, sobre todo, a través de los sentimientos y de las emociones que la lectura provocaron en el autor, este libro te sumerge en los grandes pilares de la literatura.
Una lectura que despertará aún más el deseo de leer. Kafka, García Márquez, Saramago, Virginia Woolf, Paul Auster, Belén Gopegui, Javier Marías o Almudena Grandes son solo algunos de los autores que desfilan por estas páginas. Un libro de libros para amantes de la lectura.
Cúspide, desde la perspectiva de la plenitud de la edad, de la poesía amorosa nerudiana, estos Cien sonetos de amor sorprenden ante todo por el contraste entre la palpitación de la palabra y la imagen y la deliberada elección de una desnudez que rehúye los prestigios sonoros o constructivos del soneto clásico.
«Con mucha humildad ―escribe Neruda―, hice estos sonetos de madera, les di el sonido de esta opaca y pura substancia», que contrapone a las «rimas que sonaron como platería, cristal o cañonazo» de los poetas que anteriormente abordaron el soneto. Del mismo modo, es evitado el principio del mantenimiento de un patrón métrico y rítmico invariable, y, más aún, la estructura silogística y simétrica en la exposición de lo contenido en cuartetos y tercetos
¿Cuál era el cargo de Pilato y cuáles sus funciones? ¿Cómo es que San Juan Bautista fue ejecutado sin la autorización de los romanos, y sin embargo para matar a Jesús sí era necesaria? ¿Sabías que Pilato no actuó en solitario, sino como presidente de un tribunal? ¿Qué le impulsaba a salvar a Jesús, y por qué al final no lo hizo? ¿Por qué quebrantó la ley romana que obligaba a quemar el cadáver,y permitió que le fuese entregado a María, posibilitando así la prueba posterior de la Resurrección? ¿Por qué se mantuvo incólume la túnica sagrada, que los soldados respetaron? ¿Sabías que la guardia que custodió el sepulcro no era romana, como suele creerse, sino una guardia judía del Templo? Poncio Pilato es uno de los personajes más repudiados de la Historia por su pasividad ante la suerte de Jesucristo, a quien sabía inocente.
Cuidar de un lujoso apartamento en el barrio más exclusivo de Manhattan parece un trabajo ideal para Jules Larsen, especialmente ahora que acaba de quedarse sin novio, sin casa y sin trabajo. Así que, a pesar de las peculiares normas que le han impuesto, se muda a su nuevo apartamento sin dudarlo. Cuando extraños sucesos empiezan a ocurrir, Jules piensa que son imaginaciones suyas. Sin embargo, poco a poco será innegable que tras la fachada de este magnífico edificio y de los amables vecinos que viven en él se enconden muchos secretos. Y será Jules la única que esté ahí para desentrañarlos.
Bienvenido a tu nuevo hogar… del que quizá nunca salgas.
El invierno ha llegado a los jardines de Santa Rita. Nuevas intrigas acechan a los habitantes del balneario. La hija de uno de los residentes ha confesado el asesinato de su exmarido, un cineasta de dudosa reputación, pero la inspectora Lola Galindo siente que hay algo que no encaja. El excomisario Robles comienza a investigar un plan que podría desembocar en un asesinato en la comunidad. La sobrina de Sofía, Greta, consigue por fin desvelar el último misterio de la historia de su familia y, con él, el origen de la "maldición" de Santa Rita, sacando a la luz los secretos que se creían ya sepultados para siempre.
En un pasado lejano, no la llamábamos Hiroshima, sino Ashihara. Era un amplio delta cubierto de juncos». Así comienza la descripción que la escritora Ota Yoko hace del paisaje de su ciudad natal antes de que, el amanecer del 6 de agosto de 1945, la primera bomba atómica que descendía sobre el mundo lo cambiara para siempre. En un instante, un destello de luz verde azulada dejó tras de sí cientos de miles de muertos, una cifra superior de heridos, los edificios derruidos y la tierra quemada. Apenas unos días después, Japón resolvía su rendición absoluta: la guerra había terminado, pero, como remarca la autora, la vida continuaba.
Ciudad de cadáveres es el grito agónico de una víctima apremiada por la urgencia de plasmar por escrito la devastación, el horror, la desesperación y el caos de los que ha sido testigo.