Don José es el único nombre que aparece en las páginas de este libro. Es un hombre solo, un simple escribiente, que tiene una afición secreta: recortar y coleccionar noticias sobre personas famosas, desde un obispo hasta una actriz, completando sus fichas con documentos del Registro Civil, donde trabaja. Cuando, por azar, entre las dichas de los famosos se traspapela el registro de una mujer anónima, Don José se obsesiona y comienza a buscar a la «mujer desconocida». Todo los nombres es, a todas luces, una novela psicológica, en la que el autor traza un perfecto retrato del funcionario y, a la vez, una crítica irónica a la burocracia.
Casi un millón de mujeres combatió en las filas del Ejército Rojo durante la Segunda Guerra Mundial, pero su historia nunca ha sido contada. Este libro reúne los recuerdos de cientos de ellas. ¿Qué les ocurrió? ¿Cómo las transformó? ¿De qué tenían miedo? ¿Cómo era aprender a matar? Hablan de la parte no heroica de la guerra: la suciedad y el frío, el hambre y la violencia sexual, la angustia y la sombra omnipresente de la muerte. Alexiévich deja que sus voces resuenen en este libro estremecedor, que pudo reescribir en 2002 para introducir los fragmentos tachados por la censura y material que no se había atrevido a usar en la primera versión.
Cuando el sofisticado superordenador de la NSA -la agencia de Inteligencia más poderosa del mundo- intercepta un código que es incapaz de descifrar, ésta debe recurrir a su mejor criptógrafa, Susan Fletcher.Fletcher descubrirá algo que hará tambalear las más altas esferas de poder: un intrincado código que, si llegara a hacerse público, podría provocar el mayor desastre de la historia de los servicios de inteligencia de Estados Unidos. Atrapada en una espiral de secretos y mentiras, Fletcher quiere salvar la agencia en la que cree pero, traicionada por todos, pronto se da cuenta de que debe luchar no sólo por su país, sino también por su vida. Una batalla por la supervivencia, una carrera crucial para destruir una creación de increíble sabiduría que amenaza con poner en jaque el equilibrio del poder mundial...para siempre.Un trepidante y vertiginoso thriller que transporta a los lectores desde las calles de Sevilla o los rascacielos de Tokio hasta el corazón de uno de los organismos más secretos del mundo. La primera novela de Dan Brown.
Su mujer se llamaba Magda. Lo fusilaron entre dos ladrones. Resucitó. Era cabo de un regimiento francés que en la Primera Guerra Mundial se negaba a atacar al enemigo, en un imposible intento de aplicar los principios del pacifismo en pleno campo de batalla. Una fábula, que se publicó por primera vez en 1954 y galardonada con el Premio Pulitzer ese mismo año, es una de las novelas grandes de William Faulkner; y una de las visiones más cínicas, despiadadas y lúcidas del mundo y la guerra. Este libro desolador transmite, sin embargo, la esperanza. El ser humano prevalece. El destino se ocupa de vengarlo, con un desenlace desmesuradamente glorioso. Esta es la novela que podría acabar con todas las guerras si los gobernantes enloquecidos leyeran novelas.
Pantaleón Pantoja, un capitán del Ejército, recibe la misión de establecer un servicio de prostitución para las Fuerzas Armadas de Perú en el más absoluto secreto militar. Estricto cumplidor del deber que le ha sido asignado, Pantaleón se traslada a Iquitos, en plena selva, para llevar a cabo su cometido, pero se entrega a esta misión con tal obcecación que termina por poner en peligro el engranaje que él mismo ha puesto en movimiento. Así arranca Pantaleón y las visitadoras, publicada en 1973 y llevada al cine. Mario Vargas Llosa utiliza esta anécdota para subrayar la hipocresía de las instituciones que se llaman ejemplares en relación con el oficio más viejo del mundo.
¿Cuál es el secreto que encierra La casa verde?
La Casa Verde ocurre en dos lugares muy alejados entre sí: Piura, en el desierto del litoral peruano, y Santa María de Nieva, una factoría y misión religiosa perdida en el corazón de la Amazonía. Símbolo de la historia es la mítica casa de placer que don Anselmo, el forastero, erige en las afueras de Piura.