Un romance lleno de pasión y ambientado en una oficina. Un héroe gruñón decidido a salirse con la suya y una heroína osada que empieza a preguntarse si bajo los increíbles chalecos de su jefe se oculta un corazón de oro.
Dominic: La despidieron por mi culpa. Tenía un mal día y lo pagué con una persona inocente en una pizzería. Pero Ally Morales no tiene nada de inocente, y lo demuestra durante el primer día en su nuevo trabajo... en mi oficina... después de que mi madre la contrate a mis espaldas. Puede que su personalidad alegre ilumine la redacción de la revista, puede que me guste que discuta conmigo delante de todos y puede que sus ojos marrones y su lengua afilada se hayan adueñado de todas mis fantasías, pero ella es solo un puzzle que quiero resolver. Y si consigo que dimita, quizá tenga vía libre para conocerla... Después podré dedicarme a restaurar el buen nombre familiar y olvidarme de esa morena a la que le encanta bailar y beber cerveza.
Haciendo honor a la profunda creencia de su autor en «uno de los elementos emblemáticos de la vida» y el «apogeo en las relaciones humanas», este volumen reúne los mejors poemas de amor escritos por Mario Benedetti, donde vuelca su concepción de la vida: el amor como compensación de la muerte se levanta en sus versos lleno de fe, como fuerza principal que mueve al ser humano, como una proclama de la existencia, que va de la erótica del amante hasta la esperanza del revolucionario o la gratitud del amigo.
El ancho mundo narra las aventuras, desventuras, peripecias y secretos de los Pelletier, una familia propietaria de una fábrica de jabones en Beirut, ciudad bajo influencia francesa, con la Guerra de Indochina y el París de la posguerra y la reconstrucción como telón de fondo. Y todo con un toque de exotismo y varios asesinatos.
Lemaitre nos cuenta tres historias de amor, dos procesiones, la historia de Buda y Confucio, las peripecias de un periodista ambicioso, una muerte trágica, la vida del gato Joseph, los maltratos de una esposa insoportable, la corrupción de los gobiernos, un descenso a los infiernos...