Reinventa tu cuerpo, resucita tu alma demuestra que, a pesar de su apariencia física, el cuerpo es producto de la conciencia y como tal debemos entenderlo y decidir qué hacemos con él. El poder de esa conciencia se extiende más allá de lo físico. Somos conciencia en movimiento. El alma es nuestro cuerpo espiritual y debemos volver a conectarnos con ella. Mientras reinventamos nuestro cuerpo, el alma también debe ser resucitada en asociación con él.
«Mi libro preferido, y el primero que escribí.»
Gabriel García Márquez
Con este libro, Gabriel García Márquez se descubrió a sí mismo como un narrador. Sin embargo, la intención primera era escribir un reportaje sobre un hombre, Luis Alejandro Velasco, que estuvo diez días a la deriva en una balsa mecida por el mar Caribe. El futuro Nobel de Literatura y entonces joven reportero que era García Márquez escuchó el relato de los hechos de boca de su protagonista y los transformó, tal vez sin pretenderlo, en un prodigioso ejercicio literario, una narración escueta y vigorosa donde late el pulso de un gran escritor. La publicación por entregas del reportaje en El Espectador de Bogotá supuso un alboroto político considerable -se revelaba la existencia de contrabando ilegal en un buque de la Armada colombiana, lo que costó la vida de siete marineros y el naufragio, más afortunado, de Velasco- y el exilio para su autor.
En esta novela que retoma los personajes de Santuario, el matrimonio de Temple Drake y Gowan Stevens sufre una pérdida intolerable: su hija pequeña es asesinada por su niñera, a la que luego se condena a muerte. Sin embargo, poco antes de que se cumpla la sentencia Temple buscará interceder por la muchacha. Y es que no solo está en juego la administración de la justicia, sino también la culpa histórica de toda una sociedad fundada en tierra hostil y manchada por la violencia. Contada por turnos en una prosa desbordante y como obra de teatro, Réquiem por una mujer es una inquietante exploración del impacto del pasado en el presente.