Si lo logras, aún te faltará lo más complicado: amar tu caos a pesar del roce de la vida. Y es que el roce de la vida puede hacerte olvidar quien eres y por que eres así.
La nueva novela de Albert Espinosa huele a caos, a roce de la vida, a felicidad. Todo ello con mucho humor, al ritmo de cuatro bailes y con unos personajes que están perdidos en este Mundo pero desean encontrar su Universo. ¿Estás dispuesto a amar tu caos a pesar del roce de la vida?
Con este mensaje inesperado, el pasado vuelve para sacudir la vida de un antiguo agente secreto cuando ya no tiene el escudo de su organización. Participó en la guerra sucia del Estado, convencido de su causa: la defensa de una sociedad democrática y de las víctimas inocentes contra la violencia terrorista. Pero el tiempo ha pasado, no todo salió bien y la justificación es muy lejana, mientras que él ya no puede abandonar el lado oscuro. La críptica comunicación que acaba de recibir lo reclama de nuevo.
Postrado en el hospital, Mazo necesita que su antiguo camarada Púa le ayude en una misión muy personal que él ya no puede asumir. Su hija corre peligro y tiene que alejarla de la vida que lleva y de quienes la rodean, cueste lo que cueste. Sólo alguien como Púa es capaz de llegar hasta el final para lograrlo. La llamada de su amigo lo devuelve a los días en el filo, la memoria de sus actos y las sombras de su propia naturaleza.
En una sociedad que evita el dolor y la incomodidad, es necesaria una llamada a la valentía. El miedo, la decepción o la tristeza no son los opuestos al amor, la ilusión o la alegría. Todo forma parte de la experiencia de vivir. Si queremos aspirar a los puntos dorados de la vida, hemos de estar dispuestos tambien a caer y sentir el desaliento de los puntos de sutura. La alternativa acostumbra a ser la zona media, ese espacio donde por evitar la herida cerramos las puertas a los momentos más extraordinarios. Desgraciadamente, mucha gente la elige.