Clara cuida a sus dos nietos más pequeños en Los Cacaos, un pueblo que se está quedando sin vida pues todos se van a la ciudad. Un día aparece en su árbol de mandarina un enjambre de abejas, cambiando la vida de Clara, sus nietos y de doña Juana Martina.
El río Ozama no es el mismo que Don Iván conoció en sus años mozos. Mediante un poema escrito por el abuelo en aquellos años los niños sueñan con aquel río. Durante toda la narración el abuelo y los nietos tratarán de encontrar soluciones para salvar al río que está en vías de desaparecer por la contaminación.
Este es un libro súper divertido, que cuenta la historia de Valentín, un niño que busca una abuela. Según el protagonista de la obra, todos los niños tienen abuelas, pero algunas se van muy temprano al cielo y ese era su caso. Razón por la que salió a buscar la suya a toda costa, pues las abuelas son esos seres que huelen a dulces, galletas y brindan mucho amor.
Las narraciones que aparecen en este libro despliegan gran imaginación y fantasía. La dragona protagonista de la primera historia tiene claro que no lanzará fuego para vivir y se decide por algo más interesante. ¿Será más importante su nueva ocupación que ser una simple dragona?
Luna, la protagonista del segundo relato, es una niña alegre y brillante que presenta de manera clara su identidad, los aspectos físicos y psicológicos. Nos cuenta con un lenguaje sencillo sus aventuras con las estrellas, el sol y su juguete.