Anita convirtió un pañito mágico en amuleto y cómplice inseparable contra el miedo. Se lo regaló su abuela, quien lo cosió con sus propias manos y le puso sus iniciales en una delicada tela roja de algodón orgánico. Por un evento inesperado, el pañito se extravió y la niña organizó su búsqueda porque quería entregarlo a su abuelo para que sanara de una enfermedad.
1504, cacicazgo de Xaragua. Taguarí y otras niñas se preparan para el gran ritual de convertirse en jóvenes mujeres, guiadas por la abuela Naguamacoel. Entonces empiezan a llegar noticias de los terribles hechos acarreados por el conquistador en su avance por la Isla. La tribu de Taguarí y los habitantes de los tres poblados de la Laguna Salada tienen ante sí la difícil decisión de si abandonar su hábitat de siempre para salvar su raza.
2009, en Mayagüez, Eva, una chica remolona e incrédula vivirá una experiencia muy extraña antes de aceptar que es parte de una tribu que celebra sus ancestros aborígenes.
“Y el pájaro alza la cabeza y me mira. Fija sus ojos en mí, luego se da la vuelta, como ignorándome”.
Estos relatos recrean experiencias de la infancia de José Enrique en el Cibao, una tierra noble y de ensueño, donde los días plácidos no quedaban exentos de percances. De esta forma, en sus páginas conocerán cómo se salvó milagrosamente el perro Capitán, el curioso caso del árbol de las garzas y el duelo entre el pájaro bobo y el otro bobo. Los otros dos cuentos que completan esta obra son "La tejedora de sueños" y "El Turco que vendía telas".