Edmond Dantes es un joven marinero, honrado y cándido, que lleva una existencia tranquila. Quiere casarse con la hermosa Mercedes, pero su vida se verá arruinada cuando su mejor amigo, Ferdinand, deseoso de conquistar a su prometida, le traicione vilmente. Condenado a cumplir una condena que no merece en la siniestra prisión del castillo de If, Edmond vivirá una larga pesadilla de trece años. Obsesionado por su inesperado destino, dejará de lado sus convicciones en torno al bien y al mal, y se dedicará a tramar la venganza perfecta.
El volumen 5 de la BCRAE presenta la obra más conocida de Don Juan Manuel, El conde Lucanor (1335), colección de cincuenta ejemplos, tres colecciones de proverbios progresivamente más complejos y un tratado de doctrina cristiana.
La unidad de esta obra se debe, por un lado, a su propósito didáctico, de educación de los nobles de su tiempo, y por otro a la constante presencia de dos interlocutores, el conde Lucanor y su ayo Patronio, quien aconseja, a través de los distintos procedimientos didácticos a su disposición, el saber teórico y práctico que necesitaba reunir un aristócrata de su tiempo, y con él cualquier lector u oyente del libro.
Formidable escritor y poseedor de una personalidad arrolladora, Gilbert Keith Chesterton convirtió la paradoja y el sarcasmo en sus principales armas literarias.
Las historias de El hombre que sabía demasiado nos presentan a Horne Fisher, un investigador que no resuelve los crímenes gracias a su ingenio ni a sus dotes deductivas, sino por sus conocimientos sobre los entresijos de la política británica y por su intrincada red de contactos. Pero no es el único personaje peculiar de esta recopilación de relatos que subvierten el género policíaco y al mismo tiempo nos ofrecen una de las mejores obras de uno de los grandes autores que ha dado la literatura inglesa.
El jugador documenta el descenso a los infiernos de la adicción al juego, de la expatriación forzosa y de los amores destructivos e imposibles. Dostoyevski nunca incorporó tantos elementos autobiográficos a una novela suya, lo cual la hace más terrible y descorazonadora, si cabe. El jugador es una novela intensa, apasionante y repleta de humor. Sin duda, una de las cumbres literarias del realismo psicológico ruso.