Los Silmarils eran tres joyas perfectas, creadas por Fëanor, el más talentoso de los Elfos, y dentro de ellas estaba aprisionada la última Luz de los Dos Árboles de Valinor. Pero el primer Señor Oscuro, Morgoth, robó las joyas y las colocó dentro de su corona de hierro, custodiada en la impenetrable fortaleza de Angband, en el norte de la Tierra Media.
El Silmarillion es la historia de la rebelión de Fëanor contra los dioses, su exilio de Valinor y su regreso a la Tierra Media, y su guerra, desesperada a pesar de su heroísmo, contra el gran Enemigo. Es el antiguo drama que rememoran los personajes de El Señor de los Anillos, y en cuyos acontecimientos participaron algunos de ellos, como Elrond y Galadriel.
Hay cuatro personas a las que observamos. La primera es el médico, quien dejó de curar para convertirse en soldado durante la guerra más brutal de nuestro tiempo. La segunda es el asesino, un homicida que llora siempre que mata. La tercera es la mentirosa, una joven que viste un manto de erudita sobre un corazón de ladrona. Por último está el alto príncipe, un guerrero que mira al pasado mientras languidece su sed de guerra.
El mundo puede cambiar. La potenciación y el uso de las esquirlas pueden aparecer de nuevo, la magia de los días pasados puede volver a ser nuestra. Esas cuatro personas son la clave.
Una de ellas nos redimirá. Y una de ellas nos destruirá.
En un futuro lejano, en un planeta remoto, se libra una compleja lucha que tendrá repercusiones en toda la galaxia. En las arenas de Akarris, más conocido como Dune, aprender a sobrevivir no es suficiente...