«El profesor Gottlieb Söhngen, mentor académico y supervisor de la tesis de doctorado de Joseph Ratzinger, estaba convencido de que era imposible prepararse adecuadamente para hacer teología sin contar también con la filosofía: 'No importa cuán largo sea el camino de la filosofía, nunca es una desviación respecto a la teología; más bien, permite a uno embarcarse en el trabajo teológico eficaz más pronto que tarde'. Análogamente, Joseph Ratzinger / Benedicto XVI, defendió la idea de que una filosofía robusta es el marco interior de la teología, y al contrario, una filosofía débil no se corresponde con una teología robusta. La conversación y el diálogo con filósofos clásicos y contemporáneos es una de las características más sobresalientes en el pensamiento del papa teólogo. Una compilación de los interlocutores más relevantes y una visión de conjunto de los tópicos, tal como los que provee este libro, cubre un vacío en la literatura ratzingeriana». (Del prólogo de Rudolph Voderholzer)
"Reflexiones sobre la filosofía del hitlerismo" es un artículo aparecido en la revista Esprit, en 1934, poco después del ascenso de Hitler al poder. Como escribió Levinas en un post scriptum de 1990: "El artículo parte de la convicción de que el origen de la sangrienta barbarie del nacionalsocialismo no radica en una anomalía contingente del razonamiento humano, ni en algún malentendido ideológico accidental. Encontramos en este artículo la convicción de que esta fuente surge de una posibilidad esencial del Ómal elemental" a la que puede conducirnos la lógica y contra la que la filosofía occidental no estaba suficientemente pertrechada".
Los conocidos como Cuadernos negros constituyen una especie de diario filosófico. Contienen las anotaciones privadas que Martin Heidegger fue haciendo de forma ininterrumpida y en paralelo a su actividad académica y a la publicación de sus ensayos, conferencias y seminarios. En ellos consigna, con su peculiar estilo de pensar, sus reflexiones desde la historia del ser, que pretenden arrojar luz sobre el sentido del tiempo presente.
Dentro de la vasta producción aristotélica, la Retórica es uno de sus dos grandes tratados sobre el arte. En concreto, el texto analiza esta disciplina lingüística siguiendo el método lógico y la erige en instrumento fundamental de la filosofía práctica, en tanto que necesaria para la persuasión. Con ello, Aristóteles presenta una completa arquitectura para la retórica, que se convierte en un estudio sobre el lenguaje que va más allá del examen de conceptos, y ofrece un campo de reflexión con enormes consecuencias para la vida humana.
«El rasgo fundamental del espectáculo moderno es la puesta en escena de su propia ruina». Así se expresaba Guy Debord en 1959. Lo que desde entonces parece claro es que –aunque las ruinas siempre ocupasen un lugar en la reflexión teórica y en la sensibilidad artística– el devenir histórico cercano ha abocado a la humanidad y a la vida en la Tierra hacia ese horizonte extraño. Siguiendo esta intuición, en este libro se estudia la presencia de las ruinas y los descampados en el arte, la arquitectura y el pensamiento europeos contemporáneos. Y, si se logra mostrar algo, eso es que las ruinas ocupan un lugar central, tanto en las denuncias más o menos veladas a los modelos socio-económicos heredados, como en las propuestas regeneradoras más recientes sobre el paisaje.
Catherine François trae a escena a unos héroes culturales casi desconocidos en Occidente, cuyas vidas constituyen fragmentos relevantes de la historia de China y un verdadero ejemplo de sabiduría.